Los cuatro cachorros de lobo que nacieron el pasado 26 de mayo en el Centro del Lobo de Robledo se encuentran en "perfecto estado". Como ha informado la Junta, la madre, Oscura, "se ha recuperado satisfactoriamente tras el parto y ya hace una vida completamente normal en la manada". Próximamente se realizará una jornada de puertas abiertas para que todos aquellos que lo deseen puedan conocerlos en este centro, que pronto contará con nuevos puntos de observación de lobos.

Los cachorros, tres hembras y un macho, han permanecido desde que nacieron con su madre y bajo los cuidados de la unidad de manejo y control veterinario del centro. Cuando se confirmó el estado de gestación de Oscura, se consideró importante que los nombres de los lobeznos estuvieran vinculados con el territorio y como un homenaje a la zona. Así, las lobas se llaman Sanabria y Tera, en referencia a la comarca y a su principal río, y el macho, Llagu, que es como en Sanabria conocen al Lago.

En Centro del Lobo tiene como uno de sus objetivos fundamentales la educación ambiental, por lo que durante las últimas semanas el equipo técnico "está realizando una importante labor de integración de los cachorros con una de las manadas". También que los visitantes puedan comprobar la evolución de los mismos a lo largo del tiempo. Por ello, este mes y en función de la evolución de los cachorros, se va a realizar una jornada de puertas abiertas para "presentar en sociedad" a los cachorros, empezando la labor de educación ambiental con los visitantes.

Los progenitores, Oscura y Atila, que acaban de cumplir ocho y siete años de edad, proceden de cría en cautividad. En concreto, el macho nació en el Centro de Educación Ambiental "La Dehesa" en Riópar (Albacete), y la hembra lo hizo en el Parque de la Naturaleza de Senda Viva en Arguedas (Navarra) y fueron cedidos al Centro del Lobo siendo cachorros.

Las cópulas se produjeron en los últimos días del mes de marzo y durante las semanas posteriores se llevó a cabo un exhaustivo seguimiento del estado de la loba gestante a través de un equipo de veterinarios especialistas de la Facultad de Veterinaria de León y de los integrantes de la Unidad de Manejo y Control veterinario del Centro. Durante los últimos días de gestación la loba fue trasladada a unas dependencias del Centro dotadas de una "lobera", donde finalmente parió en la madrugada del miércoles 26 de mayo.

Estos cachorros, junto con Robledo, nacido en 2016, constituyen el grupo de lobos nacidos en este centro de referencia.

Según datos oficiales, el Centro del Lobo recibió en los ocho primeros meses del presente año un total de 29.398 visitantes, lo que supone un incremento del 10,6 % respecto al mismo periodo del 2018. Desde su apertura en octubre del año 2015, han sido 142.790 las personas que han acudido a sus instalaciones, desestacionalizando un turismo que presenta una notable repercusión en la zona.

Por otro lado, dentro de pocas fechas se licitará la ampliación de los puntos de observación de lobos, en el Centro, por valor de 98.000 euros.