La familia búlgara que mantiene ocupada desde el pasado lunes una casa de Villalpando que no es de su propiedad está dispuesta "a pagar una renta por la vivienda, de acuerdo a su valor catastral, cuando se resuelva la herencia" del anterior dueño del inmueble, que falleció en 2015 sin hijos, ni padres, ni hermanos -un tío y varios primos son los parientes más próximos-. Así lo afirma en nombre de esta familia búlgara el vecino de la villa terracampina que les ayudó a pagar los recibos pendientes del agua y a ponerse en contacto con la Diputación para tratar de hacer lo mismo con el IBI.

Dicho vecino es Agapito Modroño Alonso, que defiende "la honradez de esta familia, muy trabajadora, que están limpiando y reformando la vivienda, y que no tienen nada que ver con los 'okupas' de Barcelona o Madrid". La mayor parte de la familia vivía en Villaveza del Agua, excepto la abuela que ya residía en Villalpando, "y ahora necesitaban venir todos porque la mujer trabaja aquí y el marido ha encontrado empleo en una explotación ganadera de otro pueblo cercano, pero no podían permitirse los altos alquileres que se piden en esta zona", afirma Modroño.

Este villalpandino asegura haber ayudado a los ocupantes de la vivienda "porque soy una mezcla de Robin Hood y Don Quijote" y cree que la ocupación de esta casa "puede ser un ejemplo de cómo se puede aumentar la población". Modroño recuerda que hace 15 años recibió un premio del Círculo de Zamora por un proyecto que pretendía repoblar la provincia proporcionando vivienda gratuita en los pueblos a familias que puedan tener niños, y cobrando un gravamen a los propietarios que mantengan casas vacías.

Curiosamente, Villalpando es uno de los pocos pueblos de Zamora que cuentan con viviendas de alquiler social, cuatro pisos recién reformados por el Ayuntamiento, pero Modroño afirma que la familia búlgara, de siete miembros, "no cabría en uno de esos apartamentos de tres habitaciones, ni probablemente el alcalde les cedería uno a ellos". Tampoco lo han solicitado, según ha podido saber este diario.

Asimismo, este vecino que ayudó a los actuales ocupantes de la vivienda incide en el carácter altruista de sus acciones: "yo no les he cobrado ni un céntimo por la casa, como me han acusado algunos. Al contrario, he puesto dinero de mi bolsillo para ayudarles a pagar todos los recibos pendientes del agua y que Aquona no les corte el suministro", afirma Modroño, aclarando también que la familia Búlgara "no tiene intención de domiciliar el IBI a su nombre, porque la casa no es suya, sino de sufragar los pagos de IBI pendientes para evitar el embargo del inmueble" ya que "ninguno de los que aseguran ser herederos de la casa ha pagado ni el agua ni el IBI en casi cinco años", reprocha el villalpandino.

Más allá de todas las circunstancias, la ocupación de una propiedad privada en un pueblo tranquilo como Villalpando no ha estado exenta de polémica en la villa.