Andavías ha rendido un merecido homenaje a la fundadora de la Asociación Cultural "León Felipe", Eugenia Fagúndez, en un acto al que asistió toda su familia y decenas de vecinos. Eugenia Fagúndez representa la historia de muchos zamoranos que en los años 50 y 60 emigraron a Alemania a buscar un futuro. Con su marido Francisco Fernández regresó a Zamora a finales de los 70, donde ingresó en un incipiente Partido Socialista que en su sede de San Torcuato asentaba su vuelta desde la II República junto a Demetrio Madrid, Andrés Luis Calvo, Domingo Mañanes o Santiago Moreno, entre otros dirigentes socialistas.

El carácter participativo, feminista y sus fuertes convicciones socialistas llevaron a Eugenia Fagúndez a pertenecer a los órganos del PSOE de Zamora; en la Comisión Ejecutiva Provincial, en la Comisión Ejecutiva Municipal o en el Comité Provincial. También como teniente de alcalde y concejala en el Ayuntamiento de Andavías, su pueblo natal, su punto de referencia al que sigue vinculada a sus 80 "y tantos", como a ella le gusta decir.

Eugenia Fagúndez es hermana de otro militante histórico socialista, Antidio Fagúndez, padre del secretario general del PSOE de Zamora, Antidio Fagúndez. Su hija, Eugenia Fernández Fagúndez, madre de dos hijos, ha sido militante de las Juventudes Socialistas junto a su primo Antidio Fagúndez hijo y a su madre Manola Campo, hija del histórico alcalde de Losacio José Campo y hermana del actual alcalde, Santiago Campo.

El secretario general del PSOE muestra "su orgullo personal" por su tía. "Eugenia fue una visionaria de los valores feministas del socialismo al inicio de la democracia defendiendo el papel de la mujer en la lucha y en las reivindicaciones de los trabajadores. Reivindicativa y participativa donde estuviera, fuera en el Ayuntamiento de Andavías o en las Asambleas del PSOE de Zamora".

Andavías rindió un justo homenaje a Eugenia Fagúndez, pero también a las mujeres luchadoras, a quienes emigraron y regresaron a su tierra y quienes siguen defendiendo sus valores, sus convicciones ideológicas y feministas después de 80 "y tantos" años.