Superan los 80 años, toda una vida cargada de vivencias. Depositarios de un legado que han transmitido a las generaciones venideras. A ellos, a los mayores se quiso dedicar ayer el día en Bermillo de Sayago. Una quincena de hombres y mujeres que representan la sabiduría del pasado, merecedores de un reconocimiento que ayer llegada de la mano de "La Mayuela" con la complicidad de los vecinos de Bermillo y el apoyo de la Asociación de Mayores.

Este día dedicado a los mayores comenzaba con el acompañamiento de cada uno de ellos por una joven madrina o padrino, con los que entraban en la iglesia para asistir a la misa en su honor. Al término de la misma José Perdiguero y su hijo Francisco ejecutaban el Baile de Bandera, una de las tradiciones más señeras de Sayago, recuperada este año en honor a los mayores.

Y para terminar, una paella cocinada por los voluntarios del Club de Jubilados que los mayores pudieron degustar entre recuerdos y buen ambiente.