La festividad de la Virgen de agosto vistió ayer toda la comarca de fiesta en cuerpo y alma. Las celebraciones de Nuestra Señora de la Asunción marcaron el calendario de misa, convite y baile en numerosos pueblos, desde Mombuey, Cobreros, Porto hasta la frontera de Calabor. El cartel de "completo" no solo se colocó en hoteles y restaurantes sino también en numerosos pueblos, desde playas a montañas de Padornelo, donde también se conmemora la festividad.

Pero fue el espectáculo del Mercado Medieval de Puebla, declarado Fiesta de Interés Turístico regional, el que aglutinó el grueso de los miles de visitantes que se desplazan hasta la comarca, en el puente de mayor actividad turística del año, con temperaturas, esta vez sí, veraniegas a lo largo del día.

Los tenderos y artesanos de los puestos del Mercado Medieval madrugaron para tener lista la mercancía pero no sería hasta las once y media de la mañana cuando, al incipiente trajín comercial, se sumaba el puro espectáculo de la inauguración en la Plaza del Azogue con un pasacalles marcado por el color de sus protagonistas y la estupefacción de los visitantes ante dragones, zancudos y músicos de gaita y tambor.

Los actores deslumbraron con su maquillaje y sus vestimentas, acordes con un pueblo invasor del norte. Como invasor también apareció el dragón por las calles de la villa y las aves rapaces que protagonizaron la exhibición en la plaza del pueblo. Amante de la cetrería y la poesía, Alfonso X el Sabio refrendó los fueros a la villa en 1263, que concedió aforamiento para que el enclave fuera uno de sus territorios repoblados, en 1220, fecha que se conmemora a un año visto.

El espacio de la Chopera concentró el adiestramiento de los más jóvenes infantes e infantas, locales o foráneas, en el arte de la flecha, la espada o el sorteo de obstáculos con los mejores palafreneros del reino.

En los templos de la comarca se vivió la fiesta del alma, como en Ferreras de Arriba, donde la charanga Scala de Zamora comenzaba su pregón de música por las calles, para anunciar poco antes de las doce el comienzo de los actos.

El alcalde de la localidad, Gregorio Sampedro "aterrizando en el cargo" se acompañaba de la procuradora de las Cortes castellanoleonesas, Leticia García Sánchez, la diputada Atilana Martínez Mayado, y concejales de la corporación en el pasacalles del Ayuntamiento hasta el templo abarrotado en el día más señalado del año.

"Un día de gloria de María que recorre todas las iglesias del mundo", como dijo el párroco Santiago Fernández. La representación de María está presente en todos los templos y con diferentes advocaciones como las Candelas, que también se conmemora en invierno en Ferreras de Arriba.

Y fue la imagen de Nuestra Señora de la Asunción la que salió a hombros y acompañada de cientos de fieles en la procesión que recorrió las calles céntricas de la población. El alma quedó colmada con el sermón dedicado a la Virgen que "compartió el sufrimiento de su hijo y compartió su gloria" y las voces de la Coral Tierras Altas de Sanabria y Carballeda.

Faltaba aún la fiesta del cuerpo, que comenzó precisamente con disfrazar la estampa para el concurso de disfraces, con acompañamiento de la charanga los Cuatro Gatos como preludio a la verbena popular. El que no tenga pueblo en fiestas, seguro que en el de al lado están con la orquesta.