Alrededor de 300 personas celebraron ayer en La Hiniesta la unión, la amistad y la convivencia a través de una comida organizada por el Ayuntamiento del municipio con motivo del Verano Cultural. La paellada, que contó con el saber gastronómico de varias cocineras del pueblo, congregó en el pabellón municipal a vecinos y forasteros en una jornada que se alargó hasta casi la noche.

La actividad fusionó la cercanía de los vecinos que día a día conviven en La Hiniesta con la llegada de los foráneos, que multiplican la población durante los meses de verano, sobre todo, en agosto.

Las fiestas estivales se prolongarán durante varios días más. Para mañana, está prevista una charla sobre salud (20 horas), mientras que el jueves arrancará la I Quedada Cicloturista (10 horas). El viernes habrá magia a cargo del artista Julio Rapado mientras que el sábado La Hiniesta se volverá asturiana por un día con una excursión a Ribadesella. El Verano Cultural se cerrará el día 18 de agosto con una exhibición de aves rapaces (12 horas).