Un vecino de Castromil se encontró esta semana una granada de mano mientras limpiaba un garaje anejo a la vivienda, lo que obligó a movilizar a efectivos de la Guardia Civil para desactivarla, lo que provocó la alarma en Castromil al ver una zona acordonada por varios agentes de la Benemérita.

El vecino de la localidad sanabresa estaba realizando labores de limpieza en el garaje que tiene junto a una vivienda de su propiedad cuando vio un artefacto que "parecía ser una granada de mano" de origen desconocido. Una vez vio el proyectil, avisó a la Guardia Civil que activó el protocolo de seguridad establecido para este tipo de ocasiones bastante habituales, especialmente con artefactos de la Guerra Civil que se encuentran enterrados en los campos zamoranos.

Varios agentes del acuartelamiento de Lubián acordonaron la zona y custodiaron el garaje a la espera de que los especialistas determinaran el tipo de artefacto y procedieran a desactivarlo. Personal especializado en la búsqueda y localización de artefactos explosivos (EBYL) de la Comandancia de Zamora identificaron la granada de mano e informaron del proyectil hallado, concretamente una PO III del Ejército de tierra que fue reglamentaria en las Fuerzas Armadas hasta mediados de los años 70 del pasado siglo.

Posteriormente, componentes del GEDEX (grupo especialista en desactivación de artefactos explosivos) desplazados hasta Castromil, procedieron a la destrucción del proyectil.

La Guardia Civil recuerda que, en caso de encontrar proyectiles, y pese a que muestren un estado de destrozo, hay que seguir el protocolo y en ningún momento trasladarlos porque son peligrosos y hay que destruirlos con agentes especializados de los diferentes cuerpos de las fuerzas de seguridad.