La cría de animales de razas autóctonas de ganado como la vacuna alistana-sanabresa, la sayaguesa o el asno zamornao-leonés recibirán un nuevo impulso de la mano de la Junta de Castilla y León, pues la Consejería de Agricultura y Ganadería ha convocado una línea de ayudas a las asociaciones de criadores que está dotada con una partida presupuestaria de 120.000 euros, y que se podrán solicitar hasta el 12 de agosto.

Esta Orden recoge como subvencionables la creación o mantenimiento de libros genealógicos y los gastos derivados del desarrollo del programa de mejora genética oficialmente aprobado para la raza. Además, todas aquellas partidas destinadas a los controles de rendimientos para la realización de las evaluaciones genéticas de los animales y los gastos de los programas de difusión de la mejora.

560 explotaciones

En la actualidad hay reconocidas en Castilla y León siete asociaciones de razas autóctonas que agrupan a 560 explotaciones ganaderas y a más de 21.500 ejemplares selectos. Tres de las siete asociaciones tienen su sede en Zamora, la de la raza asnal zamorano-leonesa, la del vacuno alistano-sanabrés y la del vacuno sayagués. Otra de ellas es la asociación de la cabra de las mesetas, que también fue fundada en Zamora aunque la presencia de esta raza es menor en la provincia. Las tres asociaciones restantes son la de la vaca serrana negra, propia de Soria, la de la oveja ojalada, de la misma provincia, y la del caballo losino, de Burgos.

Las asociaciones de ganaderos de razas autóctonas han jugado un papel esencial para evitar la desaparición de dichas razas ganaderas y preservar la diversidad zoogenética. El gran valor de las razas autóctonas radica en su rusticidad y su carácter maternal. Además, permiten el aprovechamiento óptimo de recursos naturales mediante un sistema de explotación extensivo dando como resultado unas producciones con una excelente calidad organoléptica basada en la raza, su alimentación y manejo.