La Guardia Civil de Zamora detuvo el pasado domingo a un vecino de Aspariegos como presunto autor de un delito de atentado contra agente de la autoridad. La agresión se produjo después de que el Instituto Armado llegara al pueblo para intervenir en un conflicto, ya que el detenido había agredido a otro vecino de la localidad. Cuando los agentes trataron de identificarle, el hombre se refugió en un local y amenazó a los guardias con un arma blanca para evitar que tomaran sus datos.

Ante esta situación, los agentes llamaron a la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia de Zamora, que acudieron al pueblo para planificar y ejecutar una intervención en el local. Los primeros agentes optaron prudentemente por no irrumpir en el inmueble después de constatar que la persona encerrada estaba manipulando bombonas de butano y cabía la posibilidad de que provocase una explosión.

Una vez estudiadas las opciones de intervención, la Guardia Civil decidió acceder por la fuerza al local donde se había atrincherado el sujeto para evitar la posibilidad de que se autolesionara y evitar otro tipo de daños mayores que pudieran causar lesiones en otros vecinos.

La operación culminó con la detención del individuo como supuesto autor de un delito de atentado contra agente de la autoridad. Se trataba de un varón de 45 años vecino del pueblo. Los guardias pudieron comprobar cómo había intentado, sin éxito, quitar el capuchón metálico de la bombona que sirve para evitar la salida de gas al exterior, utilizando distintas herramientas con este fin.

El hombre fue entregado a la autoridad judicial correspondiente, pero ya se encuentra en libertad