David García Montes, de Vox, es el nuevo alcalde de Roales del Pan. Su candidatura, con 59 votos (un 11% del total), fue la que menos sufragios cosechó en las elecciones del pasado 26 de mayo en este municipio, pero el apoyo de los dos concejales del Partido Popular (23,80% de los votos) y del único edil del PSOE (17,20%) sumaron la mayoría absoluta necesaria para enviar a la oposición a la ganadora de las elecciones, Berna Miguel, de Por Zamora, cuya lista obtuvo tres concejales con el 46% del voto popular. Los cuatro ediles de PP, PSOE y Vox se repartirán las distintas responsabilidades de gobierno, según explicaron ayer a los numerosos periodistas atraídos a este curioso pleno de investidura.

La votación a mano alzada confirmó el pacto a tres que el pasado jueves adelantaban este diario y también otros medios de comunicación, a pesar de que el líder de la formación de ultraderecha en Zamora, Javier Alcina, llegó a poner en su Facebook que esa información era una invención de La Opinión.

El alcalde entrante aseguró nada más jurar el cargo que el tripartito que él presidirá es en realidad "un grupo de vecinos que hemos decidido hacer un proyecto en común, vecinos de diferente ideología, de diferentes ámbitos, que estamos dando un ejemplo en todo nuestro país de lo que es hacer nueva política", por eso apostilló que "hoy las siglas han pasado a otro ámbito". Paradójicamente, esto lo decía delante de toda la dirección provincial de su partido, Vox, que abarrotó el salón de plenos para celebrar que el único concejal elegido bajo estas siglas en toda Zamora ha conseguido ser alcalde de un municipio de la relevancia de Roales del Pan. 59 votos que para Vox valdrán -si lo saben aprovechar- un escaparate o una pantalla sobre la que proyectar su campaña electoral del 2023.

De momento, el regidor David García cree que comenzará su mandato "por ver cómo están las cuentas del Ayuntamiento y ver de qué recursos disponemos" para determinar cuáles serán las primeras actuaciones a llevar a cabo, ya que las necesidades son muchas a juicio del nuevo regidor: "Roales en cuatro años no ha recibido un euro de la Diputación de Zamora y esto hace muy difícil avanzar a un pueblo, creo que tenemos un retraso considerable en infraestructuras estando solamente a dos minutos de Zamora, y creo que ya es hora de que se hable de nosotros, pero para bien, es hora de pasar página. Este Ayuntamiento es muy conocido por la cantidad de pleitos que hay y la falta de unión, y este es un momento de unión y de mucha humildad, porque prepotencia nos ha sobrado".

En cuanto al acuerdo firmado por el gobierno saliente con el Ayuntamiento de Zamora para abonar en 25 años los 1,5 millones de euros que se adeudan por el saneamiento, García no aclaró su parecer hasta que no estudie a fondo los términos del mismo y las cuentas del Ayuntamiento, pero sus socios del PP sí lo habían criticaron firmemente en el anterior mandato.

Aparte del nuevo alcalde, el otro concejal que acaparó la atención de las cámaras fue el socialista, Agustín Fernández Prieto. El edil desoyó las directrices del PSOE de Zamora, que se oponía a este tripartito presidido por Vox, pero el acta es suya y además el partido no podrá amonestarle ya que no está afiliado, se trata de un independiente, tal y como recordaba por la mañana el secretario provincial del Partido Socialista, Antidio Fagúndez. El concejal, por su parte, afirmaba que "yo no soy un político, yo soy un trabajador y lo que quiero es trabajar por el pueblo en el que he nacido", concretamente lo hará llevando el área de Obras, según explicó a la prensa sin que le faltara tiempo para recordar lo que le sucedió en 2015: "Hace cuatro años yo gané las elecciones y me quedé fuera de Ayuntamiento, y eso también hay que mirarlo". Efectivamente, en las anteriores elecciones él ya encabezó la candidatura del PSOE que cosechó tres ediles, y la candidata de la segunda lista más votada (Adeiza), salió elegida alcaldesa con sus dos votos y los dos votos del PP. Sin embargo, Berna Miguel prefirió después gobernar con los concejales socialistas, o más bien con dos de ellos, pues Fernández decidió quedarse al margen y será ahora cuando entre al equipo de gobierno de la mano de Vox. A pesar de ello, el edil que volvió a liderar las siglas del PSOE aseguraba que lo de ayer "no es una venganza".

El pleno se preveía tenso y de hecho uno de los grupos políticos que entraban en el Gobierno Local movilizó a tres parejas de la Guardia Civil que se personaron a las puertas del Consistorio. Sin embargo, todo transcurrió de forma totalmente pacífica, eso sí, en un salón de plenos que se quedó pequeño ante la presencia de numerosos medios de comunicación locales y nacionales que querían documentar la constitución del extraño tripartito de Roales del Pan, y sobre todo para acoger a la plana mayor de Vox Zamora. Ni PSOE ni Por Zamora llevaron a ningún invitado, y el PP solamente al exalcalde Miguel Ángel San Martín Pecharromán.

Por último, cabe destacar que este pacto PP-PSOE-Vox en Roales, y el acuerdo PP-PSOE en Carbajales de Alba dejan sin ninguna Alcaldía a Por Zamora, el partido fundado por Ángel Macías.

Otros pueblos

En Villalpando se cumplió el guion anunciado y la votación en urna cerrada no arrojó sorpresas: 4 votos para el candidato del PP, 3 votos para el candidato de Ciudadanos y 2 votos para la candidata del PSOE, tantos como concejales tiene cada formación, por lo que a falta de una mayoría absoluta resultó elegido el líder del partido más votado por el pueblo, Félix González Ares (PP), que afrontará su cuarto mandato consecutivo como alcalde. Esta vez tendrá que gobernar en minoría y llegar a pactos puntuales, pues Ciudadanos y PSOE no se han podido entender para formar gobierno, pero ambos grupos han anunciado que ejercerán de oposición en los próximos cuatro años. El pleno se desarrolló pacíficamente, aunque en un ambiente algo frío.

La nueva Corporación villalpandina cuenta con cinco caras nuevas. En el PP repiten el alcalde y Jesús Toranzo, y entran Concha Mayoral y Ángeles Núñez; por Ciudadanos entran nuevos su portavoz Ciriaco Gallego y también Sonia González, y se mantiene José María González, que hasta ahora estaba en el grupo no adscrito; en cuanto al PSOE, su portavoz seguirá siendo Rosana Fernández y entra como novedad el concejal José Antonio Granado. Un total de cinco hombres y cuatro mujeres, de los cuales el alcalde es el miembro de mayor edad y Sonia González la más joven.

En el resto de la comarca terracampina apenas había ayuntamientos que cambiaron ayer de color político. Uno de los que sí estrenaron partido de gobierno, y nuevo alcalde, fue Villamayor de Campos, donde tomó el bastón de mando el socialista Valentín Rodríguez.