Las movilizaciones contra la instalación de grandes explotaciones industriales de porcino volvieron ayer a la carga con una concentración en Pozuelo de Tábara, uno de los pueblos donde está prevista la instalación de una granja con capacidad para casi cinco mil plazas de cebo y ya han comenzado las obras.

Según la Asociación Pueblos Unidos de Tábara, convocante de la protesta, el Ayuntamiento concedió en enero la licencia urbanística a la promotora, "aun cuando no cuenta con la autorización de la Confederación Hidrográfica del Duero para la captación de aguas subterráneas. Necesita 17.000 metros cúbicos anuales, según la solicitud de la promotora".

El alcalde asegura que no es un requisito necesario para conceder la licencia, sin embargo para Pueblos Unidos es "una grave irresponsabilidad, pues no entendemos cómo se pueden permitir las obras sin la garantía de contar con los permisos necesarios para desarrollar la actividad ganadera".

Así se lo expusieron ayer personalmente al alcalde de Pozuelo de Tábara, el socialista Jesús Ángel Tomás Pino, quien se presentó en la concentración, lo que generó momentos de tensión por el enfrentamiento dialéctico entre las posiciones de los concentrados y el regidor. "El enemigo no soy yo, está más allá" (en referencia a la Junta de Castilla y León) aseguró el alcalde a los manifestantes, quienes le reprocharon su apoyo al proyecto y la concesión de la licencia. El alcalde de Pozuelo de Tábara insistió ayer a los manifestantes que el proyecto "es legal, cuenta con todas las bendiciones de la Junta y yo no me puedo negar a autorizarlo".

La Asociación Pueblos Unidos de la Comarca de Tábara exige la paralización de las obras en Pozuelo, así como la paralización del proyecto en Faramontanos de Tábara y reclama información, "frente al oscurantismo que rodea los proyectos de granjas industriales porcinas en la comarca. Gracias a los medios de comunicación nos hemos enterado de que en el Ayuntamiento de Tábara ha entrado un nuevo proyecto para la construcción de una explotación industrial porcina. Ahora sabemos con certeza que tendría capacidad para 6.000 cebones y que se ubicaría en La Folguera".

En vísperas de las elecciones municipales, esta asociación exige un "posicionamiento claro" de los candidatos a las alcaldías en la comarca y que "escuchen nuestras reivindicaciones y frenen la invasión de explotaciones ganaderas que nada tienen que ver con el medio rural". Inciden en que este tipo de industrias "no generan puestos de trabajo y, por mucho que se empeñen, no se van a convertir en la solución al grave problema de despoblación que sufre la provincia de Zamora".