Las campanas de la iglesia de El Piñero están para mirarlas y no tocarlas, ni mucho menos voltearlas. El Obispado de Zamora ha tomado en consideración los problemas existentes en la iglesia y entorno del templo de El Piñero expuestos por el vecino Victorino Pérez Andrés y el pasado sábado envió al arquitecto para que analizara la situación. Reconoce, en lo tocante al campanario, que "el yugo de las campanas es necesario repararlo y, además, afianzar alguna piedra de la torre".
Anuncia el Obispado su determinación de "ponernos de inmediato a reparar". Y es que Pérez Andrés les manifestó su preocupación porque las campanas se vinieran abajo y fueran a caer sobre la vivienda con los consiguientes daños. "Desde esta calle se ve cómo están muy deteriorados y a punto de romper los dos yugos que soportan las campanas" advirtió al tiempo que reclamó que se adoptaran medidas.
La actuación sobre la construcción de una valla de seguridad en el muro que existe en la zona del entorno de la iglesia quedará pendiente de que se concrete quién es el titular porque de momento no se sabe si es el Obispado o el Ayuntamiento.
La respuesta del Obispado sobre la sujeción de las campanas de edificio parroquial ha llevado al vecino a "agradecer el interés" por la decisión de resolver el problema con prontitud.
No obstante, incide en recalcar que el muro, "a parte que haya que darle un repaso por estar deteriorado por el paso de los años", requiere que se intervenga para garantizar la seguridad de las personas.
Pone de manifiesto que "en estos momentos no existe ninguna y se puede caer al vacio una persona". Repara que la altura que existe entre la parte superior del muro y la calle "es de un metro".
El caso también fue puesto en conocimiento del Ayuntamiento a primeros del presente mes de mayo .
El vecino hace hincapié en que es un lugar visitado por las personas que asisten a los oficios religiosos o que eligen este punto para disfrutar o entretenerse. Entre los que más peligro corren están las personas de la tercera edad y los niños.
El peligro o el riesgo radica en que el muro está construido casi a nivel de suelo por la parte de la superficie de la iglesia, pero luego se da un importante desnivel hacia la zona de la calle. La solución reclamada es la instalación "de una valla o muro de obra de una altura prudencial" para evitar posibles accidentes.
