La noche que da la bienvenida al primero de mayo es una de las fiestas señeras de los quintos y quintas en muchos pueblos. De Villaralbo a Coreses, Pontejos, Fuentesaúco, Carbajales de Alba o la más singular celebración en Triufé de Sanabria, son muchos los pueblos que desde la noche de ayer lucen el mayo, un prominente tronco de varios metros
En Villaralbo el mayo se plantó en los aledaños del campo de fútbol Los Barreros. Un total de 13 los quintos y quintas nacidos en el año 2000 que la noche del martes al miércoles, con la ayuda de maromas y vecinos, pusieron el mayo cortado por la tarde en la chopera. En la copa del árbol colocaron las banderas, una de España y otra de Villaralbo.
En Coreses a las 0:00 horas los quinto (Sergio, Teresa, Marina, Marta, Carlos, Álvaro, Borja, Bili, Modesto, Andrée, Noelia, Elisabeth, Ángel, Jorge y Jesús) comenzaron el levantamiento del mayo para culminar la noche con una gran fiesta en el salón Arena.
Fuentesaúco con sus 18 quintos ya tiene plantado el mayo en el campo de fútbol después de que la tarde del martes los jóvenes acudieran a cortar el tronco no sin antes dar cuenta de una comida de hermandad. La colocación del mayor reunió a numerosos saucanos, ayudando o curioseando, en una noche muy agradable de primavera.
El pueblo de Triufé y la asociación Cryosanabria organizaron la puesta de la "maia" y el "maio", que reunió a cerca de 40 personas. Las asistentes se encargaron de decorar a las figuras y prepararlas para que aguanten todo el mes en los árboles. Para concluir esta fiesta popular y recuperada en estos últimos años compartieron una comida comunitaria con todas las viandas aportadas por vecinas y vecinos.
