Un sueño municipal, una creencia firme y un trabajo "que ha costado más de diez años" llenan al cabo de felicidad al alcalde de Venialbo, Jesús Vara, que ha visto cómo se hace realidad en el pueblo una gran adecuación urbanística que supone la sobresaliente inversión económica de 266.559 euros. Para mayor alegría, es un dinero financiado por la Consejería de Fomento de la Junta de Castilla y León.
El regidor del municipio, como tantos vecinos, siguieron anteayer con expectación la colocación de una pasarela mixta -acero y madera- sobre el arroyo Talanda, con unas dimensiones "de más de 27 metros de larga y tres de ancha", que vino forjada en un solo cuerpo desde tierras cordobesas.
Su llegada en un vehículo especial llamó la atención de los vecinos porque es un transporte extraordinario que solo se ve cuando se manejan pieza descomunales o productos de cuidado. Su montaje sobre las plataformas adecuadas en ambas márgenes del Talanda, reforzada con una sólida escollera de piedra, fue una operación realizada con minuciosidad y detalle, y que se llevó a cabo con el profesional manejo de una gran grúa capaz de levantar por los aires, y desplazar de un lado, a otro semejante estructura.
El director de la obra, Iván Lobato, el contratista de Cevián, empresa adjudicataria de las obras, técnicos, operarios, el mandatario de Venialbo y vecinos pasaron parte de la jornada enfrascados en los trabajos de asentamiento o siguiendo con sus ojos la evolución del mismo porque no era para perderse el histórico momento.
"Cuando se cree en algo, y se trabaja en ello, se consigue. Es una pasarela que da seguridad vial porque el río divide el pueblo en dos y, el conjunto de la obra, supone empleo y beneficios para personas y empresas locales porque se contratan máquinas, a gente y se come por la zona" expresa orgulloso de lo conseguido el alcalde Jesús Vara.
El proyecto es más extenso que la propia implantación de una pasarela sobre el arroyo que permita a los vecinos salvar este cauce con todas las garantías y por una infraestructura acorde a la estética que se quiere mantener en Venialbo.
Es una actuación que incluye toda la urbanización de la zona, incluida la pavimentación de la Plaza Mayor del pueblo que aún ofrecía una estampa anticuada, así como la instalación de once farolas con microled, bancos, papeleras, un ajardinamiento y aparcamientos. Es todo un proyecto de remodelación urbanística y la pasarela se muestra como un elemento además de útil atractivo y estará iluminado con una tira de led.
Viene a sumarse toda esta obra de adecuación y modernización a otras intervenciones como la construcción del consultorio médico, con soportales de madera, donde anteriormente había un edificio usado como matadero y después como nave para la recogida de trastos. También se remodeló el edificio del Ayuntamiento dándole otro aire a la Plaza Mayor porque no tenía ni placa.
La Alcaldía resalta el apoyo prestado para sacar adelante este proyecto por el exdelegado Alberto de Castro, que desde el primer momento creyó en el y sacó la financiación.
