Alcañices abría en la noche del sábado en la iglesia parroquial de la "Virgen de la Asunción" los actos previos a la Semana Santa con su primer pregón oficial ofrecido por el coronel de infantería de origen alcañizano Luis Manías Dacosta, con la presencia del párroco y arcipreste de Alistey miembros de las cofradías.

El pregonero alabó la Semana Santa de Alcañices rica en historia y valores y sentenciaba: "Solo hay un pero que impide recuperar el esplendor de las procesiones: carretera Nacional 122. Esperemos que pronto sea otra vez calle San Francisco".

Un sueño que solamente podrá ser realidad con la esperada reconversión en autovía A-11 de la carretera N-122 entre Zamora y Quintanilha (Itinerario Europeo 82 Helsinki-Oporto), lo cual supondría habilitar la proyectada variante por el Monte de Sahú, Río Angueira y Alto la Quinta hacia el "Cruce de Alcorcillo", volviendo a ser la travesía urbana la calle de San Francisco: nombre que tomó tras llegar en el siglo XVI a la villa los monjes observantes de la Orden Tercera de San Francisco para construir su convento y el santuario de la Virgen de la Salud que bordea la carretera.

La carretera N-122, es un hecho asumido por los alcañizanos, volverá un año más a condicionar las procesiones de la Semana Santa de Alcañices, variando algunos de los recorridos más históricos, dado que la legislación vigente en materia de carreteras del Estado no permite procesionar por la travesía de la Nacional 122, -vía de acceso entre las dos iglesias (Virgen de la Asunción y Virgen de la Salud)- y menos aún cerrarla temporalmente al tráfico. Lo que se podrá es hacer es cruzarla aunque solo sea momentáneamente.

La procesión del Domingo de Ramoses una de las más importantes de Aliste y en Alcañices, antiguamente, durante siglos, implicaba a los dos templos, salía de la iglesia de la Virgen de la Asunción hasta la Plaza Mayor donde continuaba por la calle San Francisco (Ahora travesía de la Nacional 122) hasta el Santuario Mariano Diocesano de Peregrinación de Nuestra señora la Virgen de la Salud, allí se celebraba la Eucaristía y luego reandar el camino.

Al no poder procesionarse por la N-122, el próximo domingo los alcañizanos saldrán de la Virgen de la Asunción, pero desfilarán por la calle "Dentro de la Villa", se girara hacia la plaza Ferreras y por la plaza Reverendo Domingo Dacosta se regresará. Un recorrido mucho mas corto.

Luis Manías Dacosta reflexionaba en voz alta: "Solamente aquí, en Alcañices, con una participación activa en sus actos, es donde la Semana Santa tiene un significado especial y muy intimo. Es aquí dónde como católico y como persona me acerco a ella y donde he experimentado una serie de sentimientos profundos, inspirados en nuestra fe común. En este momento de incredulidad, casi incluso de laicismo, hay que sacar aquello que se venera a la calle sin vergüenza y mostrarlo al mundo, porque alguien se mueve por algo más que por una mera atracción turística, pero para que se mantenga la tradición, hay que implicar a las nuevas generaciones".

Sentenciaba el pregonero que la cultura tradicional está entre los valores endógenos alistanos y alcañizanos que unas veces se tambalean y otras sobreviven pero a duras penas. Y fue claro: "Hay que velar por ella, hay que conservar el patrimonio histórico cultural nuestro pueblo". Aseveró que "los valores permanentes, tradicionales, culturales, religiosos y familiares son nuestra esencia misma. No están reñidos con el progreso y deben convivir juntos" parafraseó a un paisano alistano.

Alabó Manías Dacosta los esfuerzos en el pueblo por mejorar y actualizar "Nuestra Semana Santa, recreando la cofradía de la Vera Cruz nuevamente, recuperando para las procesiones con u vistosidad la capa parda alistana de Honras y Respeto y los mantos negros; hay una excelente banda de tambores que capitanea Luciano Rego; se han restaurado muchas imágenes y se han mejorado los pasos" y aquí destacó la labor del infatigable Isidro Rivas "Por su dedicación no solo a la Semana Santa, sino a todos los eventos religiosos".

Y en la parte lúdica reflejó "la que ponen las hermanas del Amor de Dios con el reconfortante chocolate con bizcochos después de la Vigila Pascual".

La Semana Santa de Alcañices ha calado hondo en muchos alcañizanos y recordó como su tío Antonio, destinado en San Sebastián, hace muchos años cuando no había ni autovías ni potentes automóviles. "Vino en coche desde el País Vasco, cantó el miserere y se volvió".

Para los alcañizanos, según Luis Manías Dacosta: "No hay nada mas sobrecogedor que ver a nuestro Cristo de la Piedad en la Procesión del Silencio" y ensalzó el paso de la Virgen Dolorosa como "el que representa lo que siente el pueblo", que este año volverá a procesionar en la noche del Viernes Santo tras ser restaurada. La cuota anual de cofrade podrá ser abonada todos los domingos de Cuaresma y durante todos los días del Novenario a la puerta de la iglesia y durante la Semana Santa: "La imágenes podrán ser portadas por hombres y mujeres indistintamente sean o no cofrades, haciendo relevos".