Miembros de la Plataforma 102 de Porto. La revuelta de la "España Vaciada" es el momento de la ciudadanía, como señalan en un comunicado compartido por todos los participantes "sin símbolos políticos ni sindicales. Las plataformas que organizan y secundan La Revuelta de la España Vaciada transmitimos con este comunicado que no queremos en la manifestación del 31 de marzo en Madrid ningún símbolo ni banderas políticas o sindicales".

Las plataformas que integran este movimiento "surgen de la ciudadanía, de un sentir de abandono y dejadez por parte de las administraciones y gobiernos, por ello pedimos el máximo respeto a los partidos y que los políticos que quieran asistir lo hagan solo como ciudadanos".

Los diferentes colectivos suscriben que La Revuelta de la España Vaciada "nace como consecuencia de la omisión o inacción de la clase política en la defensa de derechos reconocidos constitucionalmente como son la igualdad, la vertebración, la cohesión o el equilibrio territorial de este país. Su incumplimiento " en muchos casos, ha provocado la despoblación de sus tierras y la ausencia de servicios básicos y oportunidades, siendo ya este un problema del 70% del territorio".

Esta manifestación se caracteriza por "la unión de gentes de muy diversas procedencias y de diferentes ideologías, todas unidas para hacer ver a nuestros representantes políticos la existencia de un problema grave que deben resolver de forma urgente".

El papel de los partidos políticos en nuestro sistema democrático es "proponer, acordar y legislar para resolver estos problemas planteados por la ciudadanía a través de la representación política, y ahí es donde queremos verles, aportando soluciones". Teniendo en cuenta además la cercanía a los procesos electorales "consideramos fundamental mantener la imparcialidad" que esta convocatoria ciudadana ha concitado.

Lo que esperan las plataformas y los ciudadanos de todos estos territorios es que "los partidos políticos planteen un Pacto de Estado dotado con financiación para revertir las desigualdades, la desvertebración, los desequilibrios y la despoblación". Por todo la recomendación a los políticos que, en el caso de querer participar, "lo hagan a título individual como ciudadanos y rogamos a todos los participantes en la manifestación que se abstengan de mostrar símbolos, banderas y emblemas partidistas en la misma, con el objeto de poder mantener la unidad de procedencias, espíritus y valores que nos ha unido".

El papel principal en la manifestación será para las plataformas y colectivos por orden de fecha de adhesión y "los políticos que finalmente asistan, se sitúen lógicamente detrás de todas ellas, o a nivel individual como ciudadanos en el final del bloque de sus territorios".

La Plataforma 102 de Porto mantiene así su actividad en al defensa de un territorio deficientemente comunicado y atendido por los servicos básicos, aunque integrado en un Espacio Protegido.