Una oficina bancaria de Corrales del Vino era objetivo ayer de un atraco a mano armada que pasó desapercibido en esta tranquila localidad de la provincia de Zamora.

El robo se produjo en torno a las nueve y media de la mañana en la oficina de Unicaja Banco (Caja Duero) ubicada en la Plaza Mayor de Corrales, hasta hace algunos años conocida como plaza del Generalísimo.

Los ladrones eran dos individuos armados con pistolas que amenazaron a los dos empleados del banco que en ese momento en se encontraban en la oficina, así como a un cliente que tuvo la mala suerte de entrar en el momento del robo y que también fue retenido por los amigos de lo ajeno mientras duró el atraco.

Los agentes de la Guardia Civil que investigan el caso para identificar y detener a los autores todavía no se atreven a confirmar si las armas utilizadas por los atracadores eran de verdad o réplicas realistas. En cualquier caso, ninguna de las tres personas presentes en el establecimiento en el momento de los hechos resultó herida, según fuentes vecinales.

Llama la atención el hecho de que un atraco a punta de pistola en una oficina en pleno centro urbano de la localidad pasara desapercibido para la vecindad. Incluso el agente de policía local de Corrales se encontraba en la zona a la hora del atraco, realizando otras labores propias de su oficio, pero no observó nada extraño en ese momento, según informaba ayer el alcalde, Mario Castaño Tejedor. Por eso se trabaja con la hipótesis de que los dos ladrones, en lugar de correr, se comportaran con tranquilidad tras salir de la oficina con el dinero robado, con el objetivo de pasar desapercibidos, y que tuvieran aparcado un vehículo para huir en otra calle del municipio. De esta manera, consiguieron estar lejos de la sucursal cuando alguien pudo llamar a la policía, una vez concluido el robo.

Ayer al cierre de esta edición aún no había trascendido a cuánto ascendía la suma de dinero sustraída por los atracadores.

No es la primera vez que los atracadores de bancos eligen un pueblo de la oficina de Zamora para cometer sus fechorías. Muy cerca de Corrales, en Morales del Vino, se producía un robo similar en una oficina de bancaria en enero de 2016, cuyo autor fue condenado en 2018 a cuatro años de cárcel por esos hechos. También han sido objeto de atracos oficinas bancarias de Mombuey, en mayo de 2016, Trabazos, en septiembre de 2017, y más recientemente en Santibáñez de Vidriales en diciembre de 2018.