La abundancia de fauna salvaje en el ecosistema de la comarca natural de Aliste, Tábara y Alba está llevando a la proliferación de estampas hasta ahora impensables con animales propios del campo que campan a sus anchas sin miedo alguno por el interior de los cascos urbanos de los pueblos.

La última se daba en la mañana del pasado lunes en la localidad de Litos, a la vera de la Reserva Regional de Caza de la Sierra de la Culebra, cuando un ejemplar de lobo ibérico decidió abandonar la serranía y darse una vuelta por la calle principal del pueblo, para sorpresa de los vecinos.

Según manifiesta Eduardo Alonso Fernández, alcalde de Litos, "la verdad es que estamos en plena sierra de la Culebra y es fácil ver cerca del pueblo lobos, corzos o jabalíes, pero en las calles y a plena luz del día es la primera vez". La imagen que acompaña estas líneas fue tomada en la calle La Fuente de Litos a las 8.45 de la mañana.

En otro pueblo cercano a la sierra de la Culebra, Figueruela de Arriba, en los últimos meses se han producido varios accidentes de tráfico a la entrada de la localidad por atropello y choque con jabalíes. Los ciervos también se han hecho a la presencia humana y no dudan en acudir a los huertos urbanos en busca de alimentos.