Leticia Rosino Andrés se hacía ayer eterna en el pueblo que le vio crecer, en Tábara. Pervivirá para siempre en la memoria de todos los que tuvieron la suerte de conocerla y contagiarse de su vitalidad, y las generaciones futuras también sabrán quién fue Leticia y conocerán su historia, pues su nombre y su rostro han quedado grabados para la posteridad en el nuevo auditorio del municipio.

Los tabareses dieron una nueva muestra de cariño a la familia Rosino Andrés arropándola en el homenaje póstumo que se le brindó ayer en el auditorio que ya lleva el nombre de Leticia. En el recinto no cabía ni un alma más y cerca de un centenar de personas tuvieron que seguir los actos desde el exterior, para ellos las puertas permanecieron abiertas en todo momento.

El acto, además de un homenaje, tenía una parte reivindicativa para que se haga justicia con todas las víctimas de crímenes terribles como el que truncó la vida de Leticia. La fundación Leticia Rosino junto a otras plataformas y fundaciones recoge firmas para que endurecer la Ley del Menor en caso de violaciones y asesinatos "endureciendo las penas acordes con los hechos", como explicó la madre de Leticia, Inmaculada Andrés, dirigiéndose al público allí presente para pedir "el apoyo de todos" para "luchar contra esta lacra social, porque nadie estamos libres de ser el punto de mira de estas alimañas".

Las palabras de la madre, que expresaban un dolor desgarrador, conmovieron e hicieron enmudecer al auditorio: "La pérdida de un ser querido es algo natural, que tiene que suceder por ley de vida, pero no de esta manera. Te arrebatan a una hija inesperadamente. ¡Y en qué circunstancias! Sin tener la más mínima opción para evitarlo. Es algo irreparable. ¡Cuánta pena! ¡Cuánto dolor!".

Ella fue la encargada de descubrir la placa colocada en el interior del auditorio que luce el rostro de su hija y la leyenda: "El Ayuntamiento de Tábara en Pleno celebrado el día 12 de junio de 2018 por unanimidad acordó dedicar este Auditorio Municipal a la memoria de Leticia Rosino. Tábara, a 10 de marzo de 2019". Lo hizo acompañada del ex seleccionador nacional de fútbol, el marqués Vicente del Bosque.

El entrenador también pronunció unas breves palabras para expresar que se sentía "muy honrado" de que pensaran en él para ese acto, y lanzar un deseo: "Que nadie más tenga que pasar por lo que la familia y los amigos de Leticia han tenido que sufrir con su pérdida, y se tomen las medidas que sean necesarias para evitarlo".

El público tabarés coincidía en que su vecina Leticia se merecía un homenaje así en vida por todo lo que trabajó por su pueblo a lo largo de su corta vida. En ese mismo sentido se pronunció el alcalde de Tábara, José Ramos San Primitivo, preguntado por los medios de comunicación: "Más tarde o más temprano Tábara le hubiera hecho un reconocimiento a Leticia, porque se lo merecía estando viva, y yo pienso que hoy estará feliz, donde esté, de que se haga justicia a su memoria".

El último en tomar el micrófono fue la persona con la que Leticia había decidido construir un proyecto de vida, su pareja David Alonso, que presentó un vídeo que mostraba a Leticia como ella era "para que podáis recordar su vitalidad, sentido del humor y sobre todo el cariño que tenía a todas las personas que la rodeaban", una vida "corta pero tan intensa" condensada en una proyección de cinco minutos con sus mejores fotografías. Al ritmo de "Wake me up" de Avicii, una de sus canciones favoritas, la proyección mostró a Leticia rodeada de su familia, de sus amigos, y siempre con una sonrisa brillante en la cara. Y también viajando por todo el mundo, una de las cosas que la hacían más feliz: "Llevaba la vena viajera de la familia, y tenía en mente más destinos, aunque por desgracia este fue el último para ella", apuntó su tío Santiago Andrés, portavoz de la familia y encargado de presentar los actos de ayer.

Tras la inauguración, la banda de música Maestro Nacor Blanco ofreció un concierto en honor a Leticia que sin duda ella disfrutó desde donde esté, pues era una gran amante de la cultura, como expresó su familia antes de que sonaran las primeras notas.