El Colegio de Ingenieros de Montes ha estimado que el auto emitido por el Tribunal Superior que anula la caza en la Comunidad es "desproporcionado" además de que adolece de "desconocimiento de los ecosistemas". Señala que en los términos en los que se viene practicando en Castilla y León, la caza ha demostrado ser "compatible" con la supervivencia de las especies cinegéticas.

El colectivo recordó que todos los terrenos cinegéticos se encuentran regulados por planes de caza elaborados "para cada coto" que establecen las especies y cantidades que se pueden cazar de forma sostenible para ese ecosistema concreto. Por ello, el riesgo para las especies cinegéticas de no suspender la orden de caza "es mínimo" como "se viene demostrando desde hace décadas". El auto también reconoce la existencia de estudios y datos oficiales de numerosas especies desde el año 2001 y hasta 2017, por lo que si el TSJCyL estimara que esos datos "pueden no ser suficientes" para alguna especie o zona, podría haber suspendido cautelarmente "el carácter cinegético de esa especie en alguna zona" pero la suspensión de toda la orden resulta "claramente desproporcionado"."La proliferación de conejos, jabalíes, corzos y ciervos puede ser catastrófica para la vegetación, la fauna y los cultivos de muchas comarcas", auguraron. Insistieron en que el nivel de profundidad de los estudios que es "realista" exigir dista mucho del que parece insinuar el auto.