El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, se convirtió por unos minutos en el Atenazador de San Vicente de la Cabeza al coger y manejar las "tenazas de escalera" que caracterizan al protagonista de esta mascarada de verano alistana.

Sucedió en su tierra, concretamente en Piasca, pueblo perteneciente al municipio de Cabezón de Liébana, hasta donde se desplazó el pasado fin de semana la mascarada de San Vicente de la Cabeza para participar en el carnaval de Piasca.

El Atenazador llamó poderosamente la atención del mediático presidente de Cantabria, y el miembro más veterano de la comitiva alistana, Paulino Blanco Garrido, se encargó de explicarle a Miguel Ángel Revilla todos los detalles, rituales y orígenes de la mascarada de San Vicente de la Cabeza. El político quedó cautivado por la ancestral y rica cultura de la comarca de Aliste y por la sencillez de sus gentes.

El carnaval de Piasca lograba juntar en la montaña cántabra a mascaradas llegadas de diferentes regiones de España y también de Portugal en un encuentro promovido por la asociación local "Andruido en la Paré" con la colaboración del Gobierno de Cantabria, del grupo de acción local Liébana y de la Red Cántabra de Desarrollo Rural.

Allí, el Atenazador de San Vicente compartió desfile con mascaradas como la anfitriona Andruido en la Paré, de Piasca (Cantabria), los Caretos de Parada (Portugal), el Entroido de Cobres (Pontevedra), el Antruejo de Carrizo de la Ribera (León) y con las agrupaciones musicales cántabras Banda de gaitas Peña Gedio, Aula de Cultura Tradicional Valle de Camaleño y con la Cofradía del aguardiente de orujo y vino de Liébana.

Lugareños y visitantes, en su mayoría cántabros y asturianos, disfrutaron del recorrido por el calles y plazas del pueblo desde los "praos" de los llanos hasta la iglesia románica de Santa María la Real de Piasca, declarada Monumento Nacional en el año 1930. Por la tarde todas las mascaradas se desplazaron hasta la rotonda de la localidad de Ojedo (municipio de Cillorigo de Liébana) y desde allí realizaron un desfile hasta la Torre del Infantado de la villa de Potes.

La comitiva alistana del Atenazador estuvo integrada por 12 vecinos, de ellos nueve hombres y tres mujeres: Adrián Blanco Rivera, Paulino Blanco Garrido, Javier Martín Vaquero, Iván Fernández Ferrero, Víctor Fernández Caballero, Johan Ferrero González, Alexander Vaquero Canas, Miguel Ángel Pérez Casas, Pedro Rodríguez Fernández, Sonia Fernández Ferrero, María Belén Blanco Rivera y Rocío Fernández Ferrero.

Todos ellos se han mostrado "muy satisfechos y encantados de llevar las ancestrales tradiciones heredadas de nuestros antepasados, bisabuelos, abuelos y padres, a tierras cántabras, haciendo cientos de kilómetros para trasmitir a las nuevas generaciones unos valores culturales de nuestros orígenes que no pueden perderse".