El paseo por el campo depara en ocasiones desagradables sorpresas, como la proliferación de vertederos incontrolados. Es el caso del existente en el término de Luelmo de Sayago, donde residuos de construcción, plásticos o viejos neumáticos aparecen esparcidos en pleno campo.

Los desaprensivos han hecho de este espacio un vertedero, en lugar de depositar los residuos en los puntos debidamente habilitados. Desgraciadamente no son hechos aislados, para desesperación de los ayuntamientos, incapaces de controlar la acción irresponsable de personas que atentan contra el medio ambiente, a pesar de que existen lugares donde depositar y reciclar estos residuos.