Un grupo de mujeres -así hay que precisarlo porque ningún hombre por el momento se ha sumado a la iniciativa- ha hecho posible la recuperación del Club de Lectura del IES Fuentesaúco. Un variopinto plantel de lectoras, algunas vinculadas al centro educativo, desde profesoras, pasando por la responsable de la cafetería, la ordenanza, madres de alumnos, vecinas de Fuentesaúco o la librera del pueblo, conforman este pequeño oasis donde se comparte la pasión por la literatura.

Tan saludable proyecto cultural en el ámbito rural partió de una reunión entre el director del instituto, Ángel Rodríguez, y la coordinadora del Plan de Fomento de Lectura, Soledad Grande, donde se plantearon la idea de rescatar el Club de Lectura que hace años funcionó en el centro con bastante éxito. "Nos parecía muy interesante porque, a parte de fomentar la lectura y la cultura en una zona rural, también sirve para extender lazos de unión entre nuestro centro y el resto de la población" explica la profesora Soledad Grande. "Es una buena forma de tomar contacto con la gente y con el resto de la comunidad educativa que en el día a día no forma parte del instituto".

Colocaron carteles por el pueblo informando sobre la recuperación del Club de Lectura y para su sorpresa "en pocas semanas ya teníamos a bastante gente interesada en participar". Las pioneras, un grupo de mujeres trabajadoras, con inquietudes literarias y ganas de enriquecer el gusto lector.

Y con esas mimbres Soledad Grande convocó la primera reunión en noviembre donde propuso varias lecturas de distintas tendencias y gustos, actuales y clásicos. Tras un debate, las lectoras apostaron por "Yo, Julia", de Santiago Posteguillo (Premio Planeta 2018), para inaugurar la actividad del Club de Lectura. La semilla ha empezado a germinar y el club, que suele reunirse aproximadamente una vez al mes, va por va por la segunda obra, "El rey recibe" de Eduardo Mendoza.

Una iniciativa que este grupo de inquietas mujeres ha acogido con sumo entusiasmo. "Leer muchas veces nos ayuda a evadirnos de los problemas, sirve de distracción y mientras estás leyendo no estás pensando en otras cosas" coinciden en apuntar. Efectos terapéuticos que proporciona un hábito muy saludable, según coinciden los expertos y apoya la profesora Soledad Grande. "Leer te ayuda a evadirte de muchas cosas, desarrollar y cultivar la imaginación también es bueno para nuestras mentes, sobre todo en los tiempos que corren".

Para la responsable del Club de Lectura del IES Fuentesaúco "como persona y como docente pienso que leer es un acto muy importante al que no damos la relevancia que merece. Leer ayuda al cerebro a situarse y organizarse, y sobre todo es fundamental leer mucho para aprender a expresarse bien. La lectura y la escritura están íntimamente relacionadas".

Por tentadora que pueda resultar la oferta televisiva, con películas o series por doquier, "ahí te lo dan todo pensado, pero cuando lees una historia la estás haciendo tuya, tu imaginación le pone cara a los personajes, inventa los lugares... En definitiva, el cerebro trabaja mucho más y eso es bueno" reflexiona Soledad Grande.

Llevado al terreno de los estudiantes, como coordinadora del Plan de Fomento de la Lectura en el IES Fuentesaúco esta docente admite que "estamos dando pasos pero aún queda mucho por hacer". Son destacables iniciativas que se llevan a cabo en el instituto como "Todos leemos juntos", a través de la cual cada semana todo el centro lee a la vez. Tanto los alumnos de ESO, tengan la clase que tengan a esa hora, como sus profesores. "Están leyendo durante 15 minutos de esa hora de clase y, lo que es más importante, algo que no es una lectura obligatoria ni tiene que ver nada con los deberes o las distintas asignaturas", explica Soledad Grande. "El objetivo es que lean algo que les guste, por eso se les deja libertad para traer libros de casa o que saquen obras de la biblioteca que les atraigan para ese momento".

El balance hasta el momento "es bueno, está funcionando; cada semana lo hacemos a una hora distinta para que no coincida con las mismas asignaturas".

Los profesores son conscientes del "gran reto que tenemos por delante", pero la apuesta es fuerte frente a la tentadora competencia televisiva y las redes sociales. "Todo tiene cabida en nuestras horas de ocio; se puede compaginar la lectura con ver la televisión y con matar el tiempo con el WhatsApp o Instagram, de hecho estamos promoviendo iniciativas relacionadas con el Plan de Fomento de la Lectura en nuestras redes sociales" explica la profesora Soledad Grande. "Hay un camino por hacer, tenemos un gran reto que afrontar pero es un reto muy hermoso si llega a tener sus frutos".