Varios ejemplares de Tejos, localizados en el Tejedelo de Requejo, han sufrido el ataque de los desaprensivos que han dañado la corteza de varios árboles milenarios estampado nombres e iniciales sobre estos seres vivos, sin capacidad para pedir o rechazar un tatuaje ajeno.

Excursionistas ya amantes de estos ecosistemas como Valentín Sesma Berhó, autor de las fotos, deja constancia de la capacidad gratuita de dañar el patrimonio natural en un bosque y unos ejemplares protegidos.

El Tejedelo de Requejo es una de las masas boscosas emblemáticas de la comarca sanabresa y en general de la provincia al tratarse de las manchas de tejo más importantes y mejor conservadas de toda la Península Ibérica con ejemplares que pueden alcanzar una altura de 20 metros.