La iluminación navideña instalada por Ferrero Rocher en Puebla de Sanabria, dentro de la campaña "Envuelve de luz tu pueblo", regresa a la palestra informativa por motivos mucho menos agradables que los conocidos hasta ahora. Por el momento, la iluminación de la empresa creadora de los famosos bombones solo había recibido parabienes; no era para menos, las cifras de turismo y su repercusión económica en los comercios de la zona parecía contentar a propios y extraños. No obstante, una denuncia de un particular acerca de la ubicación de esta iluminación presentada ante Patrimonio de la Junta de Castilla y León, a través del sistema de Ventanilla Única en la vecina localidad gallega de Verín, parece haber dado al traste con el positivo consenso que concitaba la campaña navideña

El motivo de la reclamación se centra en el letrero instalado en el frontispicio del Consistorio, que no en el conjunto de la iluminación en el municipio, al considerar que la catalogación de Bien de Interés Cultural que tiene este edificio protegido no permite la instalación de elementos de índole comercial que puedan alterar su estética original sin consentimiento previo de Patrimonio. La denuncia, presentada por un particular en Ventanilla Única, será estudiada en profundidad por la comisión de patrimonio encargada de valorar si la instalación consentida por el Ayuntamiento es constitutiva de considerarse infracción o no.

La denuncia ha sido presentada por un particular en la comunidad gallega y la comisión de Patrimonio ha admitido a trámite dicha reclamación. Este viernes, la comisión Patrimonio abordará este tema en profundidad y valorará si la acción acometida por el Ayuntamiento de Puebla es constitutiva de considerarse infracción o no.

Ante esta situación, el delgado territorial de la Junta, Alberto Castro, comunicó ayer que el regidor de Puebla -José Fernández- no podría alegar desconocimiento de la norma dado que "el plan especial del casco de Puebla de Sanabria fue redactado y aprobado por el Ayuntamiento con él de alcalde". Asimismo, Castro señaló que Fernández no actuó de acuerdo al reglamento, ya que "el texto aprobado por el Consistorio obliga a consultar este tipo de actuaciones a la comisión de Patrimonio". En esta misma línea, el delegado territorial reprocha la actuación del primer edil socialista y afirma que, de haberlo solicitado, "la comisión se hubiera reunido de forma extraordinaria en diciembre dando el visto bueno a la iniciativa", puesto que la intención de la Junta de Castilla y León "siempre es colaborar con el resto de Administraciones", pero "siempre siguiendo los pasos que marca la ley, que en este caso no los ha marcado la Junta de Castilla y León, sino el propio Ayuntamiento de Puebla de Sanabria".

El alcalde del municipio sanabrés, por su parte, afirmó en declaraciones a este diario que el equipo de Gobierno se pronunciará acerca de la denuncia cuando "conozca en contenido de la misma", momento en el que estudiará efectuar o no alguna alegación a la comisión de Patrimonio. Fernández calificó la reclamación del particular de "ocurrencia", aunque también quiso dejar claro que "cualquiera está en su derecho de denunciar lo que considere oportuno". Del mismo modo, el primer edil socialista también catalogó en estos mismos términos, "ocurrente", la intervención de Alberto Castro y negó que Puebla haya aprobado el plan especial del conjunto histórico -documento que quiso diferenciar del "planeamiento general del municipio"-. Por último, el regidor local se preguntó si a partir de ahora todos los pueblos de la provincia tendrá que "pedir permiso a Don Alberto" cada vez que "hagamos cualquier actividad en nuestros cascos históricos".