Argusino reaparece desde el fondo del Tormes. La bajada del nivel del embalse de Almendra ha dejado al descubierto parte del desaparecido pueblo sayagués. A la vista vuelven a emerger estructuras sepultado bajo las aguas en el año 1969, cuando la cota de la presa construida en 1967 comenzó a alcanzar las primeras casas y otras construcciones.

La Asociación Argusino Vive mantiene la memoria de un pueblo que se niega a caer en el olvido y por ello evoca ahora el surgimiento de parte de sus restos por la bajada del nivel del embalse. Como informa la propia asociación, este descenso ha dejado a la vista el camino que daba acceso al pueblo, con los vestigios de lo que en su día fueron los tradicionales muros de piedra seca, "ahora ya prácticamente condenados a recordar el sendero que, en su día, fue un camino continuamente transitado".

También es posible divisar parte del cementerio, uno de los símbolos más emotivos para los argusinejos por cuanto sigue albergando en su interior las cruces dibujadas por los descendientes para marcar el lugar en el que descansan sus seres queridos. La inundación del pueblo priva a los descendientes de poder velar a sus seres queridos cuando así lo deseen. La naturaleza y la técnica imponen su ley y solo es posible divisar parte del cementerio cuando desciende el nivel del agua embalsada.

Para la Asociación Argusino Vive el nuevo descubrimiento de los restos hace emerger "los sentimientos y los recuerdos. El pueblo permanece en duermevela constante, en una lucha por no caer en el olvido pese a la condena a la que fue sometido".

Nueva junta directiva

Por otra parte la Asociación Argusino Vive, creada hace dos años con motivo del 50 aniversario de la desaparición del pueblo por la construcción del embalse de Almendra, ha renovado la junta directiva con José Manuel Fernández como presidente. El resto de cargos se reparten entre Jaime Fontanillo (vicepresidente), Susana Garrote (secretaria), Jesús Edelio Vega (tesorero) y como vocales: Estefanía Vega, Evangelina García, José Luis Peñas, Juan Antonio Puente, José Manuel Vega y Ugaldo Herrero.

Argusino Vive "continúa con su labor de fortalecimiento y hermanamiento" entre los descendientes del pueblo sayagués que se reparten por distintos puntos de la geografía nacional y más allá de las fronteras. Pero ni los más lejanos confines impiden a los argusinejos mantener viva la memoria y el vínculo con la tierra que les vio nacer a ellos o a sus descendientes.

Al igual que la anterior junta directiva, los nuevos representantes de Argusino Vive cuenta con la "fortaleza de poseer entre sus miembros a argusinejos nativos del pueblo, así como descendientes y terceras generaciones que nunca llegaron a conocer la tierra de sus ancestros". Se mantiene así la versatilidad de un grupo de personas que conjugan "la experiencia y el conocimiento de la tierra con el espíritu revitalizador' que aporte la energía necesaria para poder continuar con la labor de dinamización sociocultural que se propone continuar la asociación en la comarca de Sayago.

Así, los objetivos de la nueva directiva pasan por fortalecer los lazos de los argusinejos, con especial empeño en la realización de encuentros y hermanamientos. Realizar actividades deportivas, sociales y culturales vinculadas a Argusino. Colaborar con otras entidades locales, regionales y estatales en la realización de actividades, y mantener viva la relación y presencia, tanto en los medios de comunicación como en las redes sociales para hacer que perviva la memoria de Argusino de Sayago.