La Fundación Patrimonio Natural de Castilla y León, dentro del Proyecto Interreg Programa Operativo de Cooperación Transfronterizo "Paisaje Ibérico", realizó el pasado 17 de noviembre en Pinilla de Fermoselle una actividad de reforestación junto con voluntarios/as de la Fundación La Caixa-Zamora y vecinos del municipio.

La iniciativa consistió en la plantación de encinas y alcornoques, y el objetivo es recuperar el paisaje después del incendio del verano de 2017 que se llevó por delante muchas de las encinas centenarias que abanderaban este paisaje y que daban sombra al ganado y cobijo a las especies silvestres, según informa Mabel Cervera. Unos 20 voluntarios de todas las edades colaboraron en esta actividad, calificada de muy positiva para el Medio Ambiente y que, gracias a la Asociación "Apadrina un Quercus" de Pinilla de Fermoselle, velarán por su crecimiento para que todas las plantas puedan crecer y convertirse en grandes robles que vuelvan a acompañarnos durante muchos años".

Este proyecto transfronterizo está cofinanciado al 75% por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) y también participan como socios la Universidad de Valladolid (coordinador) y en la parte portuguesa el Instituto Politécnico de Branganza (IPB) y la Universidad de Trás-os-Montes y Alto Douro (UTAD).

Fiasco de Help Me

Que las plantaciones y los árboles recién colocados necesitan un miramiento para conseguir el enraizamiento y que alcancen la madurez y la frondosidad esperada es una gestión que todos dan por obligada.

En Pinilla de Fermoselle de todos es conocido el desastre en el que acabó la plantación concierto promovida por el Movimiento Help Me, con la colaboración de la Diputación de Zamora y el Ayuntamiento de Villar del Buey.

Prácticamente las más de doscientas encinas plantadas con una superficie de 1,5 hectáreas de terreno, en los pagos conocidos como "El Matiza" y "Los Brusquiles", aparecen resecas y tumbadas por el suelo como palos resecos. Lo que se presentó como una iniciativa "sostenible y extensible a otros lugares de la provincia" ha quedado en un ejemplo de abandono y negligencia, en una operación vergonzosa y en un despropósito ecológico. Los plantones fueron colocados al son de música folclórica el último día de abril de 2016 sin la presencia de los vecinos de Pinilla, que decidieron asistir a la romería de San Miguel Arcángel. Todas las encinas, o la mayoría, tenían un nombre propio, y allí se informó que regresarían algún día a ver el planto hecho un árbol. Hoy el escenario es una planicie vacía donde solo crecen algunas plantas que algunos han instalado para tratar de remediar el fiasco.

Pero Pinilla de Fermoselle es un territorio del Parque Natural de Arribes del Duero habitado por un puñado de personas que aman la naturaleza y en especial a árboles como los olivos, las encinas, los alcornoques y el enebro.