La Dirección General de Producción Agropecuaria de la Consejería de Agricultura de la Junta de Castilla y León ha sacado a información pública el Estudio de Impacto Ambiental del proceso de concentración parcelaria local de Rabanales de Aliste realizado por el equipo de trabajo integrado por los ingenieros agrícolas Tomás Tovar Júlvez y Matías Hernando Carnicero.
Un nuevo y firme pasó para conseguir la concentración parcelaria que fue solicitada por el Ayuntamiento que preside el alcalde Domingo Ferrero Cruz el día 14 de enero de 2009.
El caso concreto de la afección al Patrimonio Histórico y Cultural el impacto se juzga como moderado, no obstante se reconoce que "Muretes de piedra, molinos y corrales de pastores pueden sufrir importantes deterioros durante la explotación de las nuevas parcelas consecuencia de la falta de valoración por parte de los nuevos propietarios".
Dentro del perímetro a concentrar se han identificado una serie de elementos singulares típicos alistanos que han de ser conservados durante y después del proceso de concentración.
Entre ellos destaca la conservación estricta en la medida de lo posible de los muros de piedra más conocidos en Tierras de Aliste como paredes: «Se debe procurar hacer coincidir las nuevas lindes de distintos propietarios con estos elementos y evitar su destrucción en la mejora de los caminos actuales. En caso de tener que eliminarlos se deberán reconstruir nuevamente con los mismos elementos de que se componían, que deben ser conservados durante la obra hasta su rehabilitación posterior".
En cuanto a los linderos y los setos formados por especies arbóreas o arbustivas estricta será también su conservación: "Para ello se procurará hacer coincidir estos setos con los linderos de las nuevas parcelas; cuando se eliminen lindes entre parcelas que pasen a constituir una sola finca de reemplazo, se podrá realizar una extracción reducida con el fin de permitir el paso de personas, animales o maquinaria".
Por otra parte el Estudio de Impacto Ambiental considera "Imprescindible" que las áreas recreativas de "El Chano" y "La Fuente" se mantengan como bienes comunales y se garantice su continuidad, juzgándose el impacto como compatible. Así mismo "No se espera un notable impacto sobre las especies micológicas" y se le viene a juzgar por los técnicos como compatible.
Compatible, con sus pros y sus contras, se ve la afección al problema de los temidos incendios forestales. Por un lado el incremento de la accesibilidad promovido por una moderna red de caminos llevará asociado un aumento del riesgo de generar fuegos campestres, pero también pueden actuar como cortafuegos y favorecer su extinción.
El Estudio considera como positivo el impacto sobre la evolución y la calidad de vida de la población de Rabanales pues supone una mejora de nivel ya que "el proceso de concentración parcelaria influirá económicamente de una forma muy positiva en el conjunto de la población" con infraestructuras y fincas para una agricultura y ganaderías viables.
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