Los veterinarios zamoranos de la Junta de Castilla y León vivieron ayer una jornada de huelga para reivindicar su condición de sanitarios. El Sindicato de Veterinarios de Zamora (Siveza) cifró el seguimiento en un 57 % entre los veterinarios, farmacéuticos y médicos de la consejería de Sanidad. En el servicio de Agricultura la cifra de profesionales que secundó los paros alcanzó el 75 %, según las mismas fuentes sindicales. El presidente de Siveza, Tomás Yanes, calificó de "abusivos" los servicios mínimos impuestos por la administración y que se extendieron en el 80 % de las 12 unidades veterinarias de Zamora. "Donde más ha afectado la huelga es en la expedición de documentos oficiales", señaló Yanes durante la concentración que tuvo lugar ante la sede territorial de la Junta en Zamora a la que asistió una veintena de profesionales. Tampoco se pudieron llevar a cabo las analíticas en el laboratorio de Zamora, donde solo se cubrieron los servicios mínimos con una persona que atendió la recogida de muestras. La jornada también se notó en los mataderos de la provincia, concretamente en las localidades de Fuentesaúco y en Coreses, donde la actividad se redujo considerablemente.

El colectivo de veterinarios volvió a exigir, una vez más, su equiparación salarial y de derechos con los empleados sanitarios asistenciales. "El veterinario desempeña una función fundamental para evitar la transmisión de enfermedades de los animales al hombre. Es un reconocimiento que no se está haciendo", lamentó Yanes.

Los representantes de los trabajadores insistieron en que el reconocimiento de la carrera profesional debe reflejarse en las convocatorias de plazas fijas de la Junta: "Hay compañeros de más de 45 años que siguen de interinos. Estas personas conocen los pueblos, son personas que están en las zonas básicas, en las unidades veterinarias y en los laboratorios. No pedimos que no se examinen, pero queremos que se sumen los méritos", explicó el presidente de Siveza.

El presidente del Colegio de Veterinarios de Zamora, Victorio Lobo, cargó contra la consejera de Agricultura, Milagros Marcos, a la que acusó de "llenarse la boca con la labor de los veterinarios" durante la feria Ovinnova. Sin embargo denunció que "en estos momentos se está formalizando el sello DVR para la exportación en condiciones indignas. Se está exigiendo a los veterinarios que firmen porque si no la empresa les puede despedir. Estamos en la cuerda floja. No estamos amparados ni por la consejería de Sanidad ni por la consejería de Agricultura", denunció.

Los veterinarios de Zamora amenazan con prolongar las movilizaciones. Ya el pasado mes de septiembre 200 profesionales se encerraron en la Consejería de Agricultura, en Valladolid.