Familiares, paisanos alistanos, vecinos y amigos de diferentes pueblos daban anoche su último adiós al sastre Domingo Fernández Martín, ataviados con la capa parda alistana de honras y respeto, en la iglesia de San Víctor Bracarense de San Vitero.

De esta manera se le rindió un merecido y a la vez sentido y emotivo homenajea a uno de los sastres artesanos que más capas pardas elaboró en Aliste. Domingo Fernández Martín salio del tanatorio de Nuestra Señora del Pilar flanqueado por las capas de honras y respeto que llevaban entre otros su yerno Javier Aguirre Bustamante y sus nietos Jesús Palacín Fernández, así como alistanos de Figueruela de Arriba, Alcañices, San Juan del Rebollar, Sejas y San Vitero. Entre ellos fundadores y directivos de la Asociación para la promoción y el estudio de la capa parda alistana de honras y respeto, presidida por Félix Marbán Junquera, que el pasado año homenajeó a Domingo Fernández en la Jornada de Exaltación de Las Figueruelas. Entre los asistentes el alcañizano Antolín Román Losada, de Alcañices, que portó la última capa laborada por Domingo Fernández en 2014.

Fue Domingo Fernández Martín hombre de muchos oficios pues también se dedicó a la venta ambulante recorriendo los pueblos y las ferias con su carro tirado por un caballo. Gustaba él de recordar que "yo pagaba tres impuestos: matrícula de puesto fijo, matrícula de sastre y matricula de venta ambulante". Y además agricultor con su caballo tirando del arado. Y aún le quedaba tiempo para formar a algún alistano más de Cabañas, San Juan del Rebollar, Tola y San Vitero en el arte de hacer capas.

Como no podía ser de otra manera de lo que más orgulloso se sentía Domingo era de la familia que formó al casarse, con 29 años, con María Antonia Mezquita Casas de San Juan del Rebollar fruto de la cual nacieron Jesús , María, Teresa y Asunción, que le dieron diez nietos y cuatro biznietos. Domingo Fernández se ganó el respeto, cariño y admiración de los alistanos durante los 95 años de su vida.