La Federación de Asociaciones de Apicultores de Zamora acordó ayer reclamar la actuación urgente de la Junta de Castilla y León para hacer frente a la presencia de la avispa asiática ( Vespa velutina).

Los representantes de la Federación, reunidos en el Colegio de Ingenieros de Zamora, piden a la Administración, en función de lo que hacen en otras comunidades, "que facilite trampas y atrayentes a los apicultores", que se comprometen a colaborar en la erradicación de la especie invasora. Haciendo referencia "a lo que mandan los protocolos" cifran en una densidad de diez trampas por kilómetro cuadrados, y apuntan que el primer envío debería remitirse a Hermisende por ser el lugar donde se capturaron los ejemplares de velutina.

Fuentes del colectivo ponen de manifiesto que los apicultores repartirían las trampas "por las zonas de riesgo", pero consideran que debe ser el Servicio de Medio Ambiente o de Agricultura quien facilite tantos los trampeos como el atrayente porque, sostienen, no pueden los apicultores andar con la elaboración de potingues cuando se venden los compuestos adecuados. Aluden al pequeño precio de las trampas, que no supone un gran gasto en material y, al tiempo, en la necesidad de atajar un peligro que trasciende a los propios intereses de los apicultores. Afirman que los apicultores no tienen por qué sumirse en mezclas de almíbares, glucosas, ácidos y alcoholes, con el consiguiente riesgo, cuando existen compuestos elaborados para este fin.

La Federación también pide a la Junta de Castilla y León que informe del protocolo de actuación "porque tenemos constancia de que existe, pero no lo hemos visto". Reiteran que la retirada de los nidos de velutina "debe hacerse de forma correcta porque, de lo contrario, se provoca la multiplicación y es preciso acabar con todas las avispas".

Igualmente, solicitan que facilite la presencia de un técnico existente en Galicia "para que venga a darnos unas charlas en las que estén presentes apicultores, agentes medioambientales, agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza y efectivos de los Parques de Bomberos". Hacen hincapié en la Federación de Apicultores en el peligro que supone esta especie invasora, como ha quedado puesto de manifiesto en las muertes de personas atacadas por avispas velutinas ocurridas en Galicia. "No queremos alarmar, pero es tarea de todos" dicen.

Reiteran la urgencia de acabar con su presencia porque su impacto afecta no solo a los apicultores, también a los agricultores, ganaderos, turistas y personas que realicen labores silvopastorales en el campo.

La Federación de Apicultores solicitará hoy o en breve una reunión con responsables del Servicio de Medio Ambiente y de Agricultura de la Junta de Castilla y León para tratar sobre este problema, largamente anunciado, y entre otras cuestiones reclamarán que se contrate a una empresa especializada para que intervenga, busque y elimine los posibles nidos existentes en la Alta Sanabria. Destacan que en estos momentos es posible ejecutar un buena actuación porque la presencia es incipiente, y además consideran que no resulta difícil localizar los nidos si se procede con prontitud en la zona donde se ha constatado la aparición de la avispa asiática.

Por otra parte, medio centenar de apicultores de la provincia participaron en la asamblea informativa sobre la detección de los primeros especímenes de la temida avispa asiática, ( Vespa velutina), a la Alta Sanabria. La reunión se celebró este sábado, convocada por la Asociación de Apicultores Libres, donde quedó patente la preocupación de la llegada de esta especie invasora. El colectivo hace extensivo el problema a toda la sociedad por el riesgo de muerte por el veneno de esta avispa y su comportamiento agresivo.

Entre las medidas que se debatieron incluyeron pedir la rápida intervención de la Junta de Castilla y León para impedir la propagación, con el control de los posibles nidos en Hermisende y la Tejera, donde se han capturado ejemplares de la avispa. Los apicultores pidieron también la coordinación de la Junta con las administraciones de las Comunidades Autónomas donde desde hace más de 8 años se combate esta plaga, como País Vasco, Cantabria y Galicia, además de la zona norte de Portugal.

El presidente de la Asociación, José Antonio González Fernández, subrayó que en 2016 los apicultores ya pidieron a la Junta medidas de prevención ante el imparable avance de la avispa invasora desde otras comunidades, en el caso de Sanabria por el remonte de los cauces desde el norte de Portugal, limítrofes con el municipio de Hermisende.

El colectivo reclama que se instalen un mayor número de trampas. De las 500 solicitadas desde 2016 para la provincia, solo se instalaron 7 en la provincia, cinco en Sanabria y dos en Aliste. Propusieron además que los técnicos de la Junta o de otras comunidades informen de las medidas que se pueden adoptar y el control de los canales de expansión. El colectivo puso sobre la mesa los intereses económicos creados a raíz de la aparición de esta especie invasora.

Los apicultores plantearon un mayor control de las colmenas trashumantes, una de las vías de riesgo de propagación, como ha ocurrido con el avispón europeo que se ha propagado y ha aumentado su población en comarcas como Sanabria.

Apelarán al apoyo de todas las asociaciones de apicultores de la provincia e incluso de otras provincias para presionar a la Junta para que tome medidas de control.

Como medidas de autoprotección, los apicultores aumentarán el número de trampas caseras y mantendrán vigilancia por si aparecen ejemplares de Vespa velutina. Algunos llegaron a proponer una batida de apicultores para localizar los nidos en el municipio de Hermisende, en el caso de que la administración no actúe con celeridad.

Como antecedentes de la inacción de las administraciones está, además de la expansión de la velutina desde Francia y por el litoral atlántico, la expansión de la grafiosis que exterminó los olmos (negrillos) en toda la península cuando se podía haber frenado la expansión del hongo en los Pirineos, como argumentaron algunos de los intervinientes.