Llueve sobre mojado. El dicho adquiere todo el sentido si se habla de las deficiencias en el del edificio del Centro de Salud de Bermillo de Sayago. Por enésima vez y sin que, por el momento, se hayan tomado medidas, el edificio que da cobertura sanitaria al municipio de cabecera y atiende las urgencias médicas de la comarca volvió a convertirse la tarde del lunes en un mar de agua.

La esperpéntica imagen de los chorros cayendo del techo vuelve a repetirse ante la impotencia y desesperación de los profesionales. También de los pacientes, resignados y acostumbrados a sortear papeleras y recipientes esparcidos por la entrada y diversas dependencias para recoger el agua que cae de los techos. Ayer los pasillos y despachos volvían a presentarse plagados de cubos y cartones para intentar sortear la humedad y el agua que se acumulaba en el suelo. Como cada vez que llueve, los trabajadores buscan medidas de urgencia.

Ocurrió que la tarde del lunes descargó una tormenta en Bermillo y volvieron a reproducirse los mismos problemas que el Centro de Salud comarcal viene padeciendo desde su inauguración, hace una década.

Fuentes consultadas confirman que un técnico enviado por la Consejería de Sanidad ha estado inspeccionando el edificio con el fin de buscar posibles soluciones. Al parecer el agua entraría por los conductos de aire acondicionado y esa es la causa de que las goteras sea aún más evidentes en la planta baja de la moderna instalación. Tras la inspección técnica se ha contemplado la posibilidad de construir una cubierta en el moderno edificio inaugurado en julio de 2008 con una inversión de 1,8 millones de euros pagados por la Junta de Castilla y León. Lo que ha demostrado esta nueva descarga de agua es que el compromiso expresado por el delegado territorial de reparar las deficiencias no se ha cumplido. A lo más que se ha llegado es al "parcheo" de los desprendimientos que se producen cada vez que hay un aguacero.

Ni las quejas solapadas de los profesionales sanitarios, ni las denuncias públicas de la Plataforma en Defensa de la Sanidad han surtido efecto para solucionar de una vez un problema que ya ha bajado a la arena política. El consejero de Sanidad Antonio María Sáez Aguado reconoció, en una respuesta a los procuradores socialistas, que la Gerencia Regional de Salud ha reclamado en diversas ocasiones a la empresa adjudicataria de las obras, Imasa Ingeniería y Proyectos, S. A. "la subsanación de deficiencias en relación a humedades y goteras". Pero lo hizo mientras estuvo dentro el plazo de garantía, en junio de 2013. El consejero se comprometió a buscar una solución técnica "en el menor tiempo posible".