La empresa Jamarsa Bioenergía ha salido al paso de las críticas de los vecinos de Tábara que se manifestaron el pasado domingo en contra de las macrogranjas. La compañía ha dado a conocer los detalles del ante-proyecto de la Planta de Combustión de Biomasa que se pretende construir en Tábara y que constará de tres partes: una caldera y extracción de aceites de jara, dos granjas porcinas y un invernadero. En un comunicado aseguran que el impacto ambiental será "positivo" por la optimización de recursos y la ausencia de vertidos tóxicos. A ese factor suman los beneficios de la inversión -que asciende a 10,4 millones de euros- y que, apuntan, generará más de 120 puestos de trabajo.

Sin problemas de vertidos

La posible contaminación del terreno por los purines empleados en la cogeneración de energía térmica fue uno de los motivos que propiciaron la movilización de la pasada semana en Tábara. En ese sentido, Jamarsa Biomasa admite que se han diseñado dos granjas de cebo de 5.000 cabezas cada una, lo que les permitirá contar con 40 toneladas diarias de purín. No obstante señalan en un comunicado que su proyecto "nada tiene que ver con grupos integradores porcinos" y una de las diferencias, señalan, es la forma en que eliminan los residuos. El ante-proyecto presentado por la compañía explica que los purines se eliminan con la combustión y en cuanto a los gases, avanza que el sistema de filtrado evita el olor característico de las granjas. Además estima que el uso de agua será de "6 o 7 litros al día por cabeza" (65.000 de media al día teniendo en cuenta el total de animales), una cifra que consideran inferior al uso de agua de una granja convencional. Además recalcan que las granjas de cebo cumplirán con la normativa de Bienestar Animal.

En cuanto a la combustión de la biomasa -compuesta por purines y residuos vegetales- aclaran que existirán dos tipos de filtros para evitar la emisión a la atmósfera de partículas contaminantes y que estarán sujetos a la normativa de emisión de humos de la Consejería de Medio Ambiente de Castilla y León. "La ceniza procedente de la combustión de la biomasa vegetal animal es un abono natural muy apreciado y estará sujeto a la ley de almacenamiento de Abonos naturales", aclara. También confirma que la planta se alimentará de sarmientos de las viñas de la Denominación de Origen Toro

El invernadero ocupará una hectárea y en él se cultivarán plantas tropicales con un sistema de domótica que gestionará el goteo y la iluminación.

Creación de riqueza

Jamarsa Bioenergía también explica en el ante-proyecto la creación de riqueza que supondrá para la zona. A la creación de 120 puestos de trabajo -con preferencia para los pueblos de Tábara, Ferreras de Abajo, Ferreruela- suman la generación de negocio con el transporte de 3.000 trailers y un flujo de 100 personas diarias. Asimismo destacan que se ha mantenido el precio de las fincas que ya tasó Adif para la construcción de las vías del AVE.

Tras la exposición de motivos piden "el máximo respeto" a la decisión de los propietarios de las fincas. Y si no hay acuerdo entre los vecinos de Tábara, advierten de que buscarán otra ubicación.