Un total de 26 ovejas muertas y 15 heridas es el balance de la lobada que ayer sufrió la cabaña ganadera de José Gómez en Moreruela de los Infanzones. Según sus propias palabras habrían sido dos lobos los que atacaron al rebaño que estaba agrupado en una cerca de alambre. Cuando el productor acudió por la mañana para soltar las ovejas se encontró con el reguero de cadáveres esparcido por el suelo y otro grupo de ovejas heridas. José Gómez denunció esta lobada y ayer por la mañana eran retirados los cadáveres mientras trasladaba a las ovejas heridas hasta la nave de Moreruela de los Infanzones. Horas después apareció otra oveja herida.