Ecologistas en Acción pidió ayer a la Junta el fin de la media veda que arrancó el 15 de agosto y "se tome en serio las resoluciones judiciales para acabar con una práctica cinegética totalmente obsoleta". A su juicio, el retraso de la época de cría de la codorniz y la tórtola ha motivado que muchos pollos "no hayan llegado a término" por la caza de adultos, tanto aquellos a los que se han observado con huevos en su interior como los ya nacidos que mueren sin su progenitor al lado.

La caza de la codorniz comenzó, como todos los años, el 15 de agosto, "haga frío, llueva o haga calor, sin considerar la variación fenológica, migratoria y de reproducción derivada de la variación meteorológica interanual, en especial en este año 2018, que como reconoce la propia Junta, ha tenido como consecuencia el retraso de tres semanas en la cosecha del cereal".

Una vez conocidos los resultados de las primeras jornadas de caza, los datos son "pésimos y preocupantes", según la organización, para la tórtola común y la codorniz. Las quejas de los propios cazadores sobre la menor presencia de estas aves, denunció Ecologistas en Acción, "ya hace pensar en que sus poblaciones son escasas y que incluso en años favorables para su cría sus poblaciones no superan la crisis demográfica que soportan".