Altas temperaturas, vientos fuertes y una alta probabilidad de tormentas con rayos sitúan el día de hoy en la provincia, y en general toda la Comunidad, en situación de riesgo de incendios. Por ello la Junta de Castilla y León pide a la población extremar las precauciones y avisar a través del 112 de la existencia de posibles incendios forestales.

Esta situación viene provocada por un fuerte incremento de la velocidad del viento, de componente suroeste, con velocidad media entre 20 y 30 kilómetros por hora en centro, sur y este de Castilla y León, y rachas máximas muy superiores que pueden estar entre 50 y 70 kilómetros por hora, unido a una alta probabilidad de tormenta con rayos y una elevada inestabilidad en la mitad este de la Comunidad.

En estos días con temperaturas elevadas, y tratándose de la época del año con menores contenidos de humedad en suelo y vegetación, "la desecación del combustible incrementa notablemente su facilidad para arder y se espera un aumento de los índices de riesgo (índice Canadiense) que alcanzará valores extremos".

Prohibiciones

Estas condiciones meteorológicas, sumadas a la baja humedad del combustible, "incrementan la probabilidad de ignición y especialmente de la propagación". Además, los altos niveles de inestabilidad atmosférica y de tormentas pueden dar lugar a comportamientos explosivos de los incendios.

La Resolución de la Junta prohibe el uso de barbacoas y de los ahumadores en la actividad apícola, se suspenden las autorizaciones de uso del fuego y de fuegos artificiales y se prohibe el uso de maquinaria en el monte y franja de 400 metros de terreno rústico cuyo funcionamiento genere fuego, como sopletes, soldadores o radiales.

La utilización de maquinaria tipo cosechadora o empacadoras se suspenderá en los momentos en que la temperatura sea superior a 30 grados y la velocidad del viento supere los 30 kilómetros por hora, situación que se espera que ocurra en las horas centrales.