No hubo sorpresas. El inicio de la campaña de media veda en Zamora fue un desastre. Así, sin paliativos. De cada diez cazadores que salieron a patear el campo, solo dos "mojaron". Esa es la media que estima el delegado provincial de Caza, José Antonio Prada, tras consultar a socios de varios cotos y leer los "wasaps" de un colectivo del sector.

Prada que, con buen criterio, no salió ayer a cazar, consultó pasado el mediodía a un grupo de cazadores. El resultado no deja lugar a dudas: de unos 14 cazadores consultados, "solo a uno le fue muy bien, fue en un coto de Sayago; a otro bien, en la zona de Toro y al resto nada, mal".

La mayoría de los cazadores que ayer salieron al campo volvieron "bolos". Es el sino de los tiempos. Cada año hay menos codornices. No hay nadie que tenga una explicación científica, Prada tiene su propia teoría: "Cada año cruzan menos pájaros el Estrecho (de Gibraltar). Las zonas de regadío han crecido en Marruecos y se quedan allí".

Ahora, la esperanza es que las codornices, que son aves migratorias, se muevan, y algún bando se quede por tierras zamoranas: "Si hay cambios no pueden ser a peor", apunta Prada.

El único consuelo para los cazadores zamoranos (para los de algunas decenas de cotos) es la abundancia de conejos. Por primera vez, se pudo abatir esta especie en la media veda y el resultado fue bueno. Es verdad que eso ocurrió solo en determinados cotos, donde los daños son muy grandes y después de la aprobación de la correspondientes asambleas de cazadores y la declaración de la Junta de Castilla y León. A este paso, los conejos acabarán salvando la media veda y también la general.

La media veda de caza se inició ayer de forma "irregular" en las diferentes comarcas y provincias de Castilla y León, incluso fue "bastante mala" en territorios del sur y del oeste, y todo ello a pesar de "todos los buenos condicionantes" que auguraban una temporada excepcional, según recoge la agencia Ical.

El presidente de la Federación regional de Caza, Santiago Iturmendi, calificó el arranque de "muy diferente" en función de los puntos de la Comunidad. "Es bastante irregular, tirando a mala la apertura, quitando zonas de León, Palencia y Burgos", comentó a la agencia.

Esta campaña, que se prolongará durante 20 días hasta el 16 de septiembre, cuenta con un cupo máximo de 25 codornices en todas las provincias de la Comunidad. Según explicó a Ical Santiago Iturmendi, en las del norte algunos cazadores "han alcanzado el cupo solo durante la mañana, pero en pocas", mientras que en otras no lo lograrán "ni en todo el día".

Por ejemplo, señaló, en la comarca burgalesa de La Bureba de momento han hecho una media de diez codornices, mientras que en Odra Pisuerga las perchas han llegado casi al cupo. "En todo caso esperábamos más. Es una temporada floja para todos los buenos condicionante que traía", resaltó a Ical.

En todo caso, admitió que los cazadores han podido observar "muchos pollos", lo que evidencia una cría "tardía". "La reflexión es que en diez o doce días la situación mejorará y estas piezas serán adultas y cazables", comentó, según la misma fuente informativa.