El consejero de Medio Ambiente y Fomento de la Junta, Juan Carlos Suárez-Quiñones, confirmaba ayer que su departamento recurrirá la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León que mantiene paralizada la caza del lobo, después de que el jueves se conociera que este tribunal ha desestimado el recurso de reposición que la Junta interpuso contra la medida cautelar de suspender el aprovechamiento cinegético del lobo para las temporadas 2016-2017, 2017-2018 y 2018-2019.

Suárez-Quiñones afirmó que asume y respeta la decisión judicial, a la vez que anunció la presentación de un recurso, dado que su departamento sigue manteniendo un "criterio firme" en este asunto y más cuando en estos momento el equilibro entre la conservación del lobo y la ganadería extensiva está "roto".

El consejero, que realizó estas declaraciones antes de participar en la Comisión de Medio Ambiente de las Cortes de Castilla y León, resaltó la importancia que tiene la caza en la Comunidad como actividad generadora de riqueza y primordial para la conservación de las especies, a la vez que argumentó que Castilla y León ha dado un ejemplo en lo que debe ser la conservación del lobo, ya que la Comunidad cuenta con la población de estos animales más importante de Europa.

"Consensuar un plan"

Por su parte, desde la oposición se reclamó a la Junta un cambio radical de postura. El portavoz de Medio Ambiente del PSCyL, José Luis Aceves, calificó de "nefasta" la posición del PP y reclamó un plan consensuado entre conservacionistas y ganaderos que acabe, de una vez por todas, con este problema.

De forma similar se manifestó el procurador de Podemos Carlos Chávez, que aseguró que ya son cinco las normativas sobre gestión de la caza de la Junta que los tribunales han anulado en los últimos tres años, y pidió a la Junta que reconsidere su posición y que admita que la Unión Europea tiene razón al considerar al lobo especie no cinegética.