La presidenta de la Diputación de Zamora, Mayte Martín Pozo, recibía ayer en el salón de plenos de la institución provincial a los 45 trabajadores contratados en la tercera edición del Plan de Empleo Forestal 2018, una iniciativa que pretende prevenir la propagación de incendios en las proximidades de municipios de la provincia.

En esta tercera edición los trabajadores estarán distribuidos en nueve cuadrillas de cinco personas cada una que se repartirán por cuatro pueblos. Dos de las cuadrillas trabajarán en Camarzana de Tera, otras dos actuarán en Bermillo de Sayago, dos también en Alcañices y una solo en Corrales del Vino.

El plan ofrece también una oportunidad laboral a 45 vecinos de la provincia, que aprenderán a realizar diferentes tareas mientras perciben un salario, con el objetivo de tener más fácil el acceso a un segundo empleo en una empresa privada del sector forestal, una vez que haya concluido este programa.

Los trabajadores firmaban ayer los contratos con un periodo de vigencia de seis meses, y comenzaron su formación para, en los próximos días, comenzar a realizar tareas forestales coordinados por el personal técnico de la Diputación Provincial de Zamora. En la firma, además de la presidenta de la institución, estuvo presente el diputado del Área de Medio Ambiente, Manuel Martín Pérez, y el vicepresidente primero, Juan Dúo Torrado.

Este año, la partida presupuestaria de este plan de prevención de incendios asciende a 610.000 euros. De esta cantidad, la Junta de Castilla y León ha aportado 410.000 euros, y la Diputación de Zamora 200.000 euros destinados a sufragar gastos de material y logística para la realización de las tareas programadas.

Ambas instituciones, regional y provincial, colaboran de esta forma en la lucha contra los incendios forestales, una lacra para la provincia de Zamora que puede ser evitada mediante este tipo de trabajos preventivos que evitan su propagación, y también con la colaboración de los ciudadanos para que surjan medios, dado que la mayor parte de los fuegos que se registran en la provincia cada verano tienen en su origen la mano del hombre, casi siempre de forma intencionada.