El aprovechamiento cinegético en el coto de Palazuelo de Sayago está inmerso en procedimiento judicial porque los dueños de las fincas y cazadores locales quieren tener derecho a disfrutar de una práctica tradicional y no quedar al margen.
Por esta razón, propietarios de fincas de Palazuelo de Sayago tienen denunciado ante la Guardia Civil de Fermoselle y también ante la Junta de Castilla y León la organización de sendas cacerías organizas los días 17 y 19 de febrero por entender que no cumplían con la legalidad al dejarlos excluidos. En el desarrollo de estas batidas se denunció a uno de los propietarios de fincas, y ganadero de Mámoles, que cuestionó la colocación de los puestos de caza por situarse próximos a donde pastaban sus reses. No obstante, la Guardería Medioambiental dio validez al desarrollo montero.
Propietarios de fincas y cazadores locales señalan que el desarrollo de las cacerías fue denunciado con anterioridad a su celebración por entender que se vulneraba "la cesión de los derechos cinegéticos, otorgados a los hijos, a estar casado con hijos del pueblo, tener vivienda en propiedad en el pueblo y tener dos o tres hectáreas de fincas. Sobre el aprovechamiento del coto de denominado Marras y Monte Carrasca, de unas 1.900 hectáreas, existe planteado un litigio que está pendiente de resolución. Gran parte de los cazadores locales y, también propietarios de finca, no han practicado este año la caza y el malestar está a flor de piel. Los afectados denuncian un cambio en el precio de las tarjetas que perjudica a los cazadores locales y dueños de los terrenos.
