La sorpresa se la llevaron los novios. Todo parecía discurrir con normalidad en el Ayuntamiento de Granja de Moreruela, engalanado para la boda civil de Charo Guerra y Ambrosio Carro, vecinos del municipio, hasta que apareció el alcalde, Juan Carro, ataviado con una túnica cisterciense y peinado "al estilo" de la orden, como puede apreciarse en la imagen de la izquierda. Novios e invitados se tomaron con mucho humor la ocurrencia del primer edil de Granja de Moreruela, que ofició su cuarta ceremonia nupcial, la que unió a Charro Guerra y Ambrosio Carro, padres de una hija que ejerció de testigo. Los tres aparecen en la imagen de la derecha, en un momento del enlace.