La presidenta de la Diputación de Zamora, Mayte Martín Pozo, inauguró ayer la sala de extracción y envasadora de Miel Valdepalacios, en Palacios de Sanabria, en un acto en el que participaron el vicepresidente de la Institución Provincial, Juan Dúo, alcaldes y apicultores de la comarca de Sanabria-La Carballeda.

Miel Valdepalacios es una empresa familiar, cuyo responsable, Juan José Castro, es un ejemplo de emprendimiento empresarial en la provincia de personas que creen en las posibilidades del mundo rural y los nuevos yacimientos de empleo para fijar población. Esta empresa liderada por apicultores jóvenes, después de 7 años de duro trabajo asentando colmenares en Palacios de Sanabria y sus alrededores, culmina el proceso con la creación de una marca de cuidado diseño y seleccionada calidad. El proceso administrativo y de construcción de las instalaciones se ha prolongado casi tres años. La media de producción es de entre 3.000 y 3.500 kilos, una cantidad que varía según las características meteorológicas y de floración.

Las instalaciones son una apuesta por el desarrollo con una sala de extracción y envasado, única por sus medios modernos en el territorio que consta de una primera sala blanca donde se recepcionan las colmenas.

Juan José Castro se encargó de mostrar las instalaciones y explicar todo el proceso desde la recepción de los panales hasta el envasado y etiquetado. La marca sanabresa está en pleno proceso de comercialización y apertura de mercados en Valladolid, Madrid y Barcelona, entre otras.

En la sala de extracción y en una primera "sala blanca" los panales de miel y cera entran en el propio vehículo a un muelle de descarga , aislado del resto de dependencias. El sistema de colmenas empleado impide que las abejas puedan acceder a los panales de miel, en esta primera fase lo que garantiza la calidad de la miel. Tras la clasificación, los panales pasan a una segunda sala blanca, donde son introducidos en la desoperculadora, donde a la miel madura se le retira su sellado de cera: el opérculo.

El panal de miel pasa a un extractor que por centrifugado similar al de una lavadora saca la miel de las celdillas de cera estiradas por las propias abejas. Los panales de cera vacíos junto con el opérculo serán utilizados posteriormente en un ejemplo de economía circular para realizar nuevos panales, velas o jabones. Anteriormente, los opérculos son introducidos en una moderna máquina para separar la miel de los restos de cera. Mediante una bomba de trasiego, la miel es dirigida a la sala de envasado y etiquetado donde pasa por un tercer filtrado para su maduración en depósitos de acero inoxidable alimentario a una temperatura regulada con termostato. Una vez madurada la miel se procede a su envasado automático mediante succión y posterior etiquetado.

La miel etiquetada pasa al almacén de producto finalizado donde se realizarán las labores de empaquetado y diferenciación por envases de distintas capacidades. Este espacio de almacenaje aloja las instalaciones del taller para la realización de diferentes modelos de velas artesanales y envasado de jabones realizados con cera. En el piso superior de esta nave realizada con materiales que buscan su mimetismo con el entorno, se encuentra un espacio diáfano y multiusos para realizar cursos de cata de miel, propóleos o pólenes, apiterapia y otros actos relacionados con la apicultura. Castro llegó a la apicultura por ocio y por un compañero de trabajo que tenía colmenas. A partir de ahí ha sido una progresión en formación personal en cursos y publicaciones para entrar de lleno en la actividad apícola, que ayer culminaba.

Miel Valdepalacios, adherida a la Reserva de la Biosfera Transfronteriza Meseta Ibérica, se recoge en parajes donde no existen cultivos extensivos y se encuentra libre de los habituales pesticidas y herbicidas. Con aguas de excelente calidad provenientes del Parque del Lago de Sanabria y en unas montañas con la mayor densidad de lobo de la Unión Europea, bioindicador evidente de esta naturaleza privilegiada.

Una de las principales preocupaciones de la apicultura estante es la legislación "laxa" que beneficia a los apicultores trashumantes frente a las estrictas normas en instalaciones, identificación y control de las explotaciones fijas. Martín Pozo justificaba el apoyo por tratarse de gente joven que creen en las posibilidades del mundo rural, porque dota de actividad económica a toda la zona, ya que están abiertos a otros apicultores que no tienen todavía el registro sanitario y quieran obtenerlo o envasar en estas instalaciones. Y, por último, el producto miel es importante para Sanabria y la provincia.