La Guardia Civil de Zamora, en su lucha contra la droga, montó un control en la autovía A-66 el pasado miércoles que terminó con la detención de un conductor que transportaba diez kilogramos de hachís en su vehículo.

En el dispostivio establecido en el marco del Plan Telos contra el tráfico de hachís procedente de Marruecos participaban componentes del Servicio de Intervención Rápida y del Grupo Cinológico. Mientras identificaban al único ocupante de un coche detenido al a altura de Corrales del Vino, el perro detectó la presencia de sustancias estupefacientes y, tras un examen más exhaustivo del interior del vehículo, encontraron ocho botellas de plástico de 1,5 litros de capacidad escondidas en la parte interior del salpicadero, además de dos bolsas, todas ellas llenas de bellotas de hachís, que pesaban en total diez kilogramos.

El conductor fue detenido como autor de un delito contra la salud pública, delito de tráfico de drogas, y el vehículo incautado. El juez de instrucción decretó su ingreso en prisión.