Un transportistas de 42 años fallecía ayer por la tarde, aplastado por un pino, cuando cargaba en el camión madera recién talada en una zona boscosa de la sierra de la Culebra. El trabajador, residente en Montehermoso, un pueblo del norte de la provincia de Cáceres, recibió un fuerte golpe y su compañero, de origen portugués, dio aviso al número de emergencias 1-1-2, que envió un helicóptero medicalizado desde Astorga.

En la aeronave viajaban un médico y un enfermero que encontraron al trabajador sin conciencia y le practicaron un masaje cardiaco, pero ya no lograron reanimarle. También llegaron al pinar agentes del Seprona y de la Guardia Civil que esperaron la llegada de un juez de guardia que autorizara el levantamiento del cadaver.

El pinar, conocido como el Casal, pertenece al término municipal de Tábara aunque se encuentra más cerca de la localidad de Ferreras de Arriba. La pobre cobertura de telefonía móvil en la zona dificultó la comunicación con los servicios de emergencia, el copiloto del helicóptero tenía problemas para hablar con tierra y confirmar cuál era el lugar despejado de árboles más cercano al siniestro donde poder aterrizar. Finalmente se sirvió de un cortafuegos en el propio Casal. La zona es igualmente difícil de acceder por tierra, a pesar de lo cual también acudió una ambulancia del Sacyl con personal facultativo del centro de salud de Tábara.

La llegada del helicóptero desde la ciudad maragata sorprendió y preocupó a los vecinos de Ferreras de Arriba, que a esa hora se encontraban fuera de sus casas para recibir al obispo de Astorga, Juan Antonio Menéndez Fernández. La presencia de la aeronave del Sacyl hacía pensar que podría haber ocurrido un accidente en la carretera del pueblo, pero después de que se dirigiera a la sierra comenzó a correr el rumor de que había ocurrido un accidente laboral en la zona donde se estaba extrayendo madera.

La pasada semana, con motivo del Día Internacional del Trabajo, los sindicatos mayoritarios en la provincia, CCOO y UGT, señalaban el "preocupante" incremento de la siniestralidad laboral en Zamora en los últimos tiempos, con seis trabajadores fallecidos en 2017 mientras trabajaban.