Las oleadas de robos sufridas en los últimos años en las iglesias de la Raya ha llevado a extremar las precauciones retirando las imágenes y objetos de valor de las ermitas campestres. Precisamente el miedo a los ladrones llevó a la parroquia de Constantim, freguesía perteneciente al concelho de Miranda do Douro, a guardar en la iglesia del pueblo la venerada imagen de Nuestra Señora Virgen de la Luz. Antaño tenia su morada en el Alto del Castro los 365 día del año. Ahora, cada primavera, el sábado siguiente a San Marcos, día de vísperas, se sube a la Virgen en procesión a su santuario donde solo pasa la noche del sábado al domingo protegida por la Guarda Nacional Republicana.

Es el propio domingo cuando los mayordomos y devotos de Constantim visten a la Virgen de la Luz con sus preciosos hábitos con innumerables adornos de oro puro. Históricamente se dice que la Virgen de la Luz es la hermana más rica de la Raya. Devotos de La Luz mostraban ayer su malestar por el asalto al templo y los destrozos causados, más aún cuando la joyas que luce la Virgen son donaciones de sus propios devotos por algún favor pedido o recibido.