La población de Fermoselle desarrolló ayer una jornada de promoción de la arquitectura tradicional de las bodegas de la villa y también de los valores naturales que presenta el municipio, y lo hicieron organizando una visita a las típicas construcciones y una ruta de senderismo por los parajes del Parque Natural del Duero.

Del interés que despertó la actividad, organizada por la Casa del Parque Convento de San Francisco y la Asociación de Tamborileros Juan del Encina, habla la gran participación, cifrada en unas 250 personas las que tomaron parte en la visita a las bodegas y un centenar el que tomó parte en la marcha por el campo.

Todo ello a pesar de ser una jornada "pasada por agua" y que deslució el disfrute que presenta el paisaje en estas fechas, con las escobas y las jaras embellecidas por la floración e infinidad de flores llenando de colorido y de olores el ambiente natural. La gran asistencia viene a confirmar que esta actividad está ya consolidada y constituye una iniciativas con gran seguimiento.

En esta ocasión la ruta urbana elegida para conocer el patrimonio arquitectónico fue Ordial, So Castillo, La Cara, Tellerinas, La Senara, Mariabril, Montón de Tierra y Fontanicas donde es posible apreciar algunas de las bodegas típicas y que dan identifican el pasado y hasta el presente de una villa ligada de lleno a la agricultura y a la cultura del vino y del aceite.

La visita a las bodegas concentró a una gran masa de fermosellanos y algunos visitantes que tuvieron la oportunidad de conocer un patrimonio subterráneo que lleno de sorpresas, pero que se mantiene oculto, salvo excepciones y casos particulares, a la mirada de los turistas. Los organizadores consideran que estas iniciativas servirán para promocionar un patrimonio de gran importancia pero que parece olvidado por administraciones y organismos. La villa "de las mil bodegas" llaman a Fermoselle, aunque todos ponen de relieve que es mayor el número de bodegas que están presentes en prácticamente a uno y otro lado del extraordinario callejero que distingue a esta localidad arribeña.