Los propietarios que tengan previsto realizar obras en el término municipal de Moraleja del Vino tendrán que abonar un impuesto de construcción que oscilará entre los 25 y los 50 euros, según figura en la nueva ordenanza reguladora aprobada por el Ayuntamiento.

En concreto, el tributo será de 25 euros cuando el coste real y efectivo de la construcción, obra o instalación no supere los 500 euros y ascenderá a 50 euros cuando la obra o instalación supere los 500 euros y no sobrepase los 3.005 euros.

Entre las actuaciones sujetas a la nueva ordenanza se encuentran las obras de nueva planta y de ampliación de edificios, las obras de modificación o de reforma, las consideradas como obras provisionales o la construcción de vados para la entrada o salida de vehículos.

Asimismo, también se tendrá que abonar este impuesto por las construcciones, instalaciones y obras realizadas en la vía pública por particulares o por las empresas suministradoras de servicios públicos. Los particulares que pretendan realizar movimientos de tierra, tales como desmontes, explanaciones, excavaciones, terraplenados, incluso construcción de piscinas y apertura de pozos también pagarán estas cuotas, salvo que estos actos estén detallados y programados como obras a ejecutar en un proyecto de urbanización o edificación aprobado o autorizado.