El delegado territorial de la Junta de Castilla y León en Zamora, Alberto Castro, dejaba ayer claro que el Gobierno regional "vigilará el cumplimiento estricto" de todas las normativas de urbanismo, paisaje, medio ambiente e industria que tenga que cumplir cualquier explotación minera que se desee instalar en la provincia de Zamora, "como hacemos siempre con cualquier tipo de actividad". Lo hacía preguntado por la asociación que ha surgido en Arribes en contra de la minería.

El delegado recordó que la misma vigilancia estricta se lleva a cabo sobre las granjas de porcino, que se permite su instalación cuando cumplen escrupulosamente toda la normativa. Además, apostilló que "en Castilla y León no se va a instalar ninguna macrogranja porque no son legales", a pesar de "las consideraciones personales de lo que alguna gente pueda llamar macrogranjas", que oficialmente no lo son.