La Guardia Civil, en colaboración con la Consejería de Medio Ambiente, comienza el día 1 de abril una campaña de control de los transportes de residuos y demolición. La llamara "Operación Escombro" se llevará a cabo en toda la comunidad autónoma y se centrará, tanto en los residuos procedentes de la construcción de infraestructuras y edificaciones de nueva planta, como de la demolición de inmuebles, sin olvidar los derivados de pequeñas obras de reforma de viviendas y locales. La Guardia Civil intensificará la vigilancia para detectar los "traslados ilícitos y la gestión inadecuada" de los residuos de construcción y demolición.

Según informa la Benemérita, durante esta campaña se comprobará que el transportista esté registrado para el transporte de residuos, la documentación identificativa del residuo, la inspección física del mismo, así como la obra de origen y que el destino sea una instalación autorizada. La campaña estará vigente hasta el 31 de diciembre y hasta esa fecha "se realizarán varias fases de intensificación".