Los ribereños del río Castro denuncia el vertido de al menos 80.000 litros diarios de aguas sin depurar a la cuenca del arroyo Parada que proceden de las obras de los túneles del AVE y los viaductos del tramo entre Requejo y Padornelo. El vertido se produce desde hace un par de semanas a la escombrera de Parada, en el camino de Parada en el término de Requejo, destinada exclusivamente a vertidos inertes como denuncian los vecinos. La presencia de las balsas repletas de aguas grisáceas donde se descargan a diario los camiones cisterna que operan en las obras, llamaron la atención de los residentes en estos últimos días.

Estas balsas, como sostienen los denunciantes de la zona, no cumplen las medidas mínimas para evitar que las aguas se filtren a la ladera del arroyo que desagua en el río Castro, uno de los principales afluentes del río Tera, declarado Lugar de Interés Comunitario en toda su subcuenca.

Estas aguas que deberían pasar por las balsas de decantación y depuración proceden tanto de las obras de perforación del túnel como de los trabajos de construcción de los pilotes de los viaductos que discurren cuenca arriba. Las aguas procedentes de estos trabajos son contaminantes y su vertido directo a los cursos de agua está prohibido, si no hay un tratamiento previo.

La situación se agrava estos días con las nieves, el deshielo y las lluvias caídas sobre la cuenca y especialmente en todo el tramo de obras, que arrastran los vertidos hacia los ríos.

En esta escombrera está depositado además un importante número de arbolado de ribera, fresnos principalmente, y robles procedentes del movimiento de tierras de estas obras.